En el boletín de Enero de 1997, y bajo el título “Cuidado con la ‘franela’ “, la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA) denuncia a la Central de Trabajadores Argentinos (CTA) de estar negociando conquistas fundamentales del Estatuto del Periodista y del Trabajador Administrativo de Empresas Periodísticas, en el marco de los decretos flexibilizadores del gobierno.

En ese sentido, reproduce una carta fechada el 27 de diciembre de 1996, dirigida por la UTPBA a Víctor de Gennaro y a los miembros de la mesa nacional de la CTA, en la cual les expresa su “preocupación frente a actitudes de vuestra parte que entendemos inconvenientes, si en verdad a todos nos anima mantener y desarrollar las relaciones de cooperación y de unidad en la acción”.

Lo que según los dirigentes del gremio de prensa podría hacer peligrar las relaciones entre ambas entidades son “las convocatorias que desde la CTA se hacen a los trabajadores de prensa —o mejor dicho, a dirigentes de prensa— con la finalidad de mantener reuniones con el gobierno por el tema del Estatuto del Periodista y del Trabajador Administrativo de Empresas Periodísticas”. Y finaliza: “los invitamos, con el mayor respeto, a revisar lo que consideramos una línea de intervención desafortunada”, bajo el argumento sostenido por la UTPBA de que el Estatuto “no se negocia”.

Cabe destacar que dentro de la mesa nacional de la CTA actúa Néstor Piccone, actual secretario adjunto en uso (o abuso) de licencia de la UTPBA, por un año, quien habría sido el promotor de la reunión de diferentes sindicatos de prensa del interior del país con el Ministerio de Trabajo, reunión a la que la UTPBA, como entidad, se negó a concurrir.

Qué hay detrás del enfrentamiento

Si bien es correcta la denuncia de la UTPBA, el problema es que la UTPBA tampoco tiene una política para enfrentar la política flexibilizadora del gobierno y las patronales. Eso se refleja claramente en el mismo boletín de enero del ’97, donde en otro artículo plantea no ya negociar con el gobierno menemista, sino directamente con la cúpula del Mercosur, propugnando la creación, en la estructura institucional de dicho mercado, del Sub Grupo Técnico “dedicado a la temática de la Comunicación Social, formado por representantes de los gobiernos, de los trabajadores y del sector empresarial” (¡?). Así se llega al absurdo de que por un lado la UTPBA denuncia el “jueguito de las ‘charlas sesudas’… ” en “los despachos de la superestructura”, ¡y por el otro plantea que la salida ante la ‘globalización’ está en un nivel aún más superestructural y burocrático todavía!