En el día de ayer (Nota de la Redacción: por el jueves 1) nos enteramos que el Ministerio de Trabajo se negaba a homologar el cierre del conflicto ya firmado con las cámaras ABAPRA (banca estatal) y ADEBA (banca privada nacional).

 

Por las firmas que restaban con los bancos extranjeros y especiales, estaba pactada una audiencia de negociación: pero la  suspensión de la misma puso en pie de alerta al gremio. Es que aún los bancos de la cámara de la banca extranjera, que incluye al HSBC, el Citi y otros, no firmaron el acuerdo que sí rubricaron los privados nacionales y los públicos. Mientras la dirección del sindicato esperaba que la firma fuera un trámite, estalló una crisis.

 

Esto nos enseña, por un lado, la enorme improvisación y fragilidad del gabinete macrista, que desconoce un acuerdo que negoció, y por otro, la subordinación absoluta a los mandatos del capital financiero internacional. A los banqueros no les alcanza el festival de bonos ni la libertad para fugar sus ganancias, quieren también un mayor ajuste sobre el salario de sus trabajadores.

 

Es esta la orientación del gobierno: ir a un ajuste a fondo. Esta provocación debe ser entendida en ese sentido. Advertimos que vienen no sólo contra el acuerdo bancario sino contra el derecho a paritarias y por la destrucción de los convenios colectivos, orientación que le reclama toda la clase capitalista y ya adelantada por el presidente. Los bancarios estamos convocados a jugar un partido en nombre de toda la clase trabajadora, por la defensa del salario y de nuestras conquistas históricas.

 

En este cuadro de crisis, algunas gremiales plantearon el paro nacional bancario para el 7 de diciembre. Palazzo, secretario general del gremio, se limitó a convocar a asambleas sin atención al público, el día martes, sólo en los bancos extranjeros. En el comunicado, La Bancaria pone el paro a disposición del Secretariado Nacional. Toda dilación en la convocatoria juega en contra de la medida.

 

Desde Tribuna Bancaria insistimos que la fuerza que nos permitió lograr este acuerdo es la de los trabajadores movilizados y tomando la lucha en nuestras manos. En esa fuerza debemos confiar para torcer el brazo del gobierno y de los banqueros. Por eso planteamos la necesidad inmediata de asambleas y plenarios de delegados en todos los bancos, que voten el paro del 7 y su continuidad en un plan de lucha y preparen una enorme movilización para el día miércoles. El gremio es uno solo y debe golpear como un solo puño.

 

Debemos desarrollar a fondo las medidas de fuerza, que de no retrotraer el ataque del gobierno y los banqueros a nuestro acuerdo nos obligarán a suspender la operatoria bancaria indefinidamente para defender lo que es nuestro. En ese sentido, llamamos al Secretariado Nacional de La Bancaria a no suscribir ningún acuerdo que no incluya la devolución de los días caídos (en el Banco Provincia se descontó la jornada del 28 de octubre).

 

Por la defensa del acuerdo conquistado; por la indexación del salario según la inflación; por la eliminación del impuesto al salario. Basta de despidos encubiertos bajo los retiros voluntarios. Planta permanente a los tercerizados. Contra el ajuste de los banqueros, Macri y los gobernadores.

 

– Inmediata homologación del acuerdo y firma ya de todas las cámaras

– Paro y movilización el 7 de diciembre

– Asambleas y plenarios de delegados que voten el plan de lucha por todas nuestras reivindicaciones

– Si no hay respuesta preparación del paro por tiempo indeterminado