El 12 de julio, un mes después de la firma del acuerdo salarial con Telefónica (luego extendido a Telecom) la directiva de Foetra llamó a una "asamblea general" vaciada de todo contenido, para discutir una paritaria ya acordada. La asamblea general, como órgano máximo de decisión, debería convocarse antes de la firma de cualquier acuerdo con las patronales. De lo contrario, es una formalidad. Pero, aun así, la directiva buscó evitar que se exprese la base del gremio. Por eso, fue convocada en un quincho del polideportivo de Ezeiza, en una zona sin acceso al transporte público.

La asamblea derivó en una farsa, cuando la mesa acaparó todas las intervenciones. Apenas una intervención para mocionar el rechazo. Luego una catarata de intervenciones oficialistas y de la mesa donde se impidió el uso de la palabra mediante la manipulación de la lista de oradores.

Estos métodos, que desvirtúan la Asamblea General, son la única forma de hacer pasar los acuerdos a la baja, los topes salariales del gobierno y evitar así discutir el impacto del mal llamado "impuesto a las ganancias" sobre el salario.

Como parte del balance de la Asamblea y de las recientes elecciones de Foetra llamamos a impulsar la organización independiente de los trabajadores para superar estos métodos burocráticos y recuperar la tradición de lucha de Foetra como un Sindicato independiente de las empresas y el gobierno.