Sindicales

6/2/2019

Después de Añelo, vamos por un plan de lucha

Contra las suspensiones y despidos, por un nuevo diagrama y comités obreros de seguridad.

Agrupación Obreros del Petróleo

La masiva concentración obrera del martes pasado en Añelo y el reciente anuncio de Tecpetrol de que bajará tres equipos de perforación merecen, antes que nada, algunas reflexiones. 


La burocracia sindical de Pereyra ha desvirtuado lo que es una verdadera asamblea obrera. Porque más que una asamblea, lo de Añelo fue un Acto en defensa de los subsidios a las empresas y en apoyo a las candidaturas del MPN para las elecciones del 10 de marzo.


Pereyra convoca a una "asamblea”, en la que sólo hablan los burócratas del sindicato y donde nada se vota, cuando están en riesgo los beneficios de los empresarios. Pero no actuó de la misma forma ante las sucesivas muertes de compañeros y accidentes laborales que sufrimos por la superexplotación y la negligencia empresarial, ni ante los despidos de 1.800 viejos en diciembre de 2016. 


Por el contrario, en el mismo momento que caíamos como moscas en el campo por la inseguridad laboral, Pereyra firmaba un convenio anti-huelga con las empresas y el gobierno.


A pesar de todo esto, no podemos perder de vista que la concentración obrera del martes en Añelo ha puesto de relieve la enorme fuerza que podríamos tener los viejos si nos unimos y nos ponemos en movimiento por nuestros derechos.


Respondamos a la ofensiva empresarial


El mismo martes por la tarde, a horas de que se haya terminado la jornada de Añelo, Tecpetrol anunciaba la baja de tres equipos en Fortín de Piedra y la suspensión de 300 viejos. 


Pereyra entregó nuestras condiciones laborales con la firma de la adenda al CCT (Convenio colectivo de trabajo) y luego entregó nuestro derecho a luchar firmando la cláusula anti-huelga. Todo esto, en función de “darle garantías a las empresas” y de esa forma recuperar los puestos de trabajo, los que ahora vuelven a estar en peligro. El fracaso es completo.


La pregunta que se impone es ¿Qué dice ahora Pereyra? ¿Va a cumplir con lo que dijo el martes en Añelo? ¿O va a aceptar la suspensión de compañeros? 


Desde la Agrupación Obreros del Petróleo creemos que es necesario rechazar las suspensiones. Hay que reclamar que Tecpetrol abra sus libros de contabilidad. Porque si los abre, quedará claro que está ganando fortunas y tranquilamente se puede hacer cargo de estos 300 compañeros.


No sólo eso, la potencia demostrada en Añelo tiene que servir para que confiemos en nuestras propias fuerzas, y salgamos a pelear por la anulación de la adenda al CCT, por un cambio de diagrama – pasando del 2×1 al 1×1 – y por la elección de comités obreros de seguridad e higiene con poder de paralización de maniobras, para terminar con la muerte de compañeros.


Pero para imponer esto, es necesario iniciar un verdadero Plan de lucha, con paros y movilizaciones, mandando al carajo la cláusula anti-huelga.