El gobierno de Mauricio Macri disolvió la paritaria nacional docente. Luego, en la provincia de Buenos Aires, la gobernadora María Eugenia Vidal ofreció un aumento salarial de 18% en cuatro tramos: aproximadamente 200 pesos mensuales de aumento. Por eso, la primera reunión de la paritaria provincial fue acompañada por una movilización de la docencia.

 

El salario inicial docente quedaría, con la propuesta oficial, en menos de 10.000 pesos, casi 4.000 pesos debajo de la línea de pobreza. El aumento no incluye al incentivo docente que, de mantenerse, no sería actualizado por inflación, lo cual es otra vuelta de ajuste. Vidal agrega que, además, habrá que establecer índices de “productividad”.

 

El brutal recorte, mientras las tarifas eléctricas tienen hasta un 150 por ciento de aumento, incluye la caída de más de 3 puntos del presupuesto educativo provincial cuando, en sentido estricto, el 70 por ciento de las escuelas se encuentran en riesgo edilicio.

 

Además, Macri anunció la eliminación para 2020 del Fondo Compensador  (1.800 millones el año pasado), que subsidia a las provincias que pagan un salario inicial por debajo del mínimo, vital y móvil de pobreza. ¿No es esto una provocación? El ministro de Educación de la provincia, Alejandro Finocchiaro, a lo guapo, dijo que “lo que vamos a ofrecer es lo que podemos, porque no se puede ofrecer lo que no se puede pagar”. Como los docentes rechazarán masivamente este atropello, Vidal amenazó con descontar los días de paro.

 

La discusión “abierta”, entonces, no es una paritaria. Es un ultimátum, que Macri pretende extender a todos los trabajadores. “Incluso, el gobierno nacional quiere imponer este acuerdo como un modelo para todo el país” (La Nación, 7/2). Un ultimátum acompañado por todos los gobernadores, que se han complotado en la misma línea. Y varios de ellos han deschavado el mecanismo que utilizarán Macri y Vidal. En Río Negro, el gobernador Alberto Weretilneck “ya anunció un tope del 17 por ciento, que se establecerá por decreto en caso de no haber acuerdo” (ídem). Será por eso que todavía ni  convocó a paritarias. En Santa Cruz, Alicia Kirchner debe el pago de salarios desdoblados, y Rosana Bertone, de Tierra del Fuego (del Frente para la Victoria) declaró que va a ofrecer por debajo de eso. 

 

 

El gobierno nacional y todos los gobernadores, durante todo el año pasado, han orquestado una campaña de desprestigio de la educación pública y  de la docencia (Operativo Aprender 2016 mediante),  amplificada pérfidamente por los grandes medios de comunicación. Buscan por esta vía hacer responsables a los docentes del deterioro educativo y colocar a los padres, también trabajadores, en contra de su lucha. Ahora, acusan a los docentes de extorsionar, poniendo a los alumnos de rehenes.

 

Pero, así como hacer pasar los despidos ilegales de Clarín contra los trabajadores de AGR pretende extender esa práctica a  todas las patronales y reemplazar las plantillas con trabajadores precarizados  con salarios por fuera del convenio, quebrar las luchas docentes de una paritaria testigo es requisito necesario si  el gobierno y los capitalistas pretenden imponer el ajustazo a todo el pueblo trabajador. Llamamos a los padres, es decir a los trabajadores de todo el país, a pasar de largo de las mentiras de las patronales y del gobierno, y a fundir nuestras luchas en una sola hasta quebrar el ajuste antiobrero. Por el no inicio de las clases y un plan de lucha por un básico de 15.000 pesos. Triplicación del presupuesto en educación

 

Finocchiaro sostuvo que “si los representantes sindicales van a actuar como gremialistas, es muy posible que cerremos un acuerdo” (ídem). María Laura Torres, secretaria gremial de Suteba, declaró un tibio “así estaremos ante las puertas de un conflicto”. La burocracia sindical de Ctera-Suteba se expresa con más cautela que los triunviros de la CGT.

 

Los Suteba combativos, Ademys, las opositoras de Aten, Adosac, Sutef, Amsafe-Rosario y los sectores antiburocráticos de todo el país se han pronunciado en contra de esta avanzada. Promovemos la realización de plenarios nacionales y provinciales de toda la docencia y de los sectores combativos, para resolver un plan de lucha y el no inicio. El IX° Congreso Nacional de Tribuna Docente se reunirá el 18 y 19 de febrero en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA (Santiago del Estero 1029), y sus deliberaciones y resoluciones fortalecerán el desarrollo de la lucha y organización independientes de la docencia en todo el país.