Sindicales

27/2/2020|1582

Docentes: Trotta y Ctera firmaron un salario inicial y paritaria de pobreza

Finalmente, en la segunda reunión largamente postergada de la paritaria nacional docente, lo que se acordó fue peor de lo que se esperaba, que ya era un ataque en regla. La burocracia de Ctera aceptó un salario inicial de 23.000 pesos a partir del 1º de marzo (13% de incremento) y de 25.000 a partir del 1º de julio (16%): la mitad de la canasta de pobreza. A eso se suma un bono en negro, no remunerativo, de 4.840 pesos, pagadero en cuatro cómodas cuotas, que no impacta en los jubilados. Este bono, según expuso en un tuit el ministro Nicolás Trotta, es a cuenta del pago del incentivo docente (Fonid) y de futuras recomposiciones provinciales.


En provincias enteras, este “aumento” de pobreza ni siquiera es tal, porque los salarios iniciales están hoy por encima de los 25.000 pesos, como en Buenos Aires, las patagónicas o Mendoza, por mencionar algunas. El operativo de ocultamiento y de parálisis de la burocracia sindical docente es obsceno, lo que ya sacan a relucir la mayoría de los medios de prensa.


Esto augura paritarias provinciales también a la baja. Al momento de escribir esta nota, se está discutiendo en Buenos Aires y Santa Cruz, y entre el miércoles 26 y el viernes 28 ocurrirá lo propio en las principales jurisdicciones. Apenas conocido el anuncio de este acuerdo escandaloso, comenzaron las reacciones de los sindicatos y seccionales multicolores y antiburocráticas, que lo rechazaron de plano, como las seccionales de Suteba multicolores o el combativo Adosac de Santa Cruz. 


El mecanismo de esta paritaria “restaurada” elimina el aumento automático del 20% sobre el salario mínimo establecido en el Consejo del Salario, que aún no ha sido actualizado, por lo que en el futuro este salario inicial puede incluso quedar por debajo del salario mínimo. De esta forma, el gobierno se asegura pagar una garantía salarial mínima por debajo de la actual. Este punto -dicen los medios- habría generado cortocircuitos con algunos sectores de la burocracia sindical, con Ctera en punta -que, sin embargo, ha agachado la cabeza.


Además, eliminan la cláusula gatillo, la que se reemplaza por una vaga promesa de revisión al finalizar el primer semestre.


Mientras, Alberto Fernández y Kicillof anunciaron que a partir de junio descongelarán y actualizarán todas las tarifas.


Esto es lo que el ministro Trotta definió como una fuerte recomposición de los ingresos de los docentes que menos cobran.


La paritaria docente en la mesa del FMI


En mayo el gobierno nacional deberá abonar 3.200 millones de dólares, equivalentes aproximadamente al 15 por ciento del presupuesto educativo nacional anual supuestamente previsto para este año, según el ministro de Educación. Una gota de agua frente a los 323.177 millones de dólares (91 por ciento del PBI) al que ha trepado la deuda pública argentina en la actualidad.


Trotta, justamente, declaró que “en el marco del proceso que lleva adelante el ministro de Economía, Martín Guzmán, de renegociación con el frente externo por la enorme deuda externa”, los salarios deben “romper la inercia inflacionaria”. La paritaria de pobreza es respuesta directamente proporcional a los compromisos establecidos con el FMI, lo que incluye el monitoreo de la política económica del gobierno de Fernández.


Un acuerdo ruinoso 


El secreto que defendieron a muerte  los gremios y el gobierno tuvo por objeto evitar la reacción de la docencia, y hacer pasar un acuerdo inaceptable.


Más inaceptable aún si tenemos en cuenta que todos los gobernadores desconocen las cláusulas gatillo; provincias como Chubut, Tucumán y Santa Fe no pagan o atrasan los compromisos paritarios de fin de 2019, las escuelas están derruidas y ya hay avances contra la jubilación en todas las jurisdicciones.


Y todavía más grave: existen presentismos esclavistas, como el ítem aula en Mendoza; el plus de productividad del 8% del salario con pérdida del 25% con cada falta, hasta 4, en Entre Ríos y los 3 puntos de aumento del puntaje para quienes no hagan paro en Santa Cruz -una política se quiere generalizar a todo el país.


Exigimos a Ctera rechazar este acuerdo escandaloso y parar 48 horas de no inicio de las cuales, en defensa de los reclamos docentes.


Reunión nacional de la oposición docente 


Este 27 de febrero, los sindicatos, seccionales y congresales multicolores, antiburocráticos y de oposición a la dirección Celeste se reunirán para repudiar este acuerdo a la baja y sin mandato de Ctera y exigir no iniciar las clases por 48 horas dando comienzo a un plan de lucha con continuidad, y resolver un plan de acción opositor desde el 2 de marzo con paros, movilizaciones y asambleas, en rechazo a los acuerdos tejidos entre Trotta, los gobernadores y la burocracia sindical.


Es el camino que vienen recorriendo las asambleas y reclamos en Misiones, Chaco, Chubut, Santa Cruz, Neuquén, Tucumán Y Santa Fe, que plantean la posibilidad de no comenzar las clases si no hay una respuesta de los gobiernos a los reclamos docentes.


Llevaremos las resoluciones allí acordadas a todas las asambleas docentes del país.


Por un salario básico de 40.000 pesos, defensa del estatuto y de las jubilaciones docentes. Plenarios de delegados mandatados por la base que definan los reclamos y el plan de acción. Paritarias libres. Que Ctera y las centrales sindicales convoquen al paro internacional por los reclamos de la mujer que se llevará a cabo el 9 de marzo. No al pago de la deuda externa.