Docentes universitarios: En defensa de las paritarias

Por un Congreso de bases y un plan de lucha de la docencia universitaria

La agrupación Naranja de docentes e investigadores universitarios rechaza de plano las pretensiones del gobierno de firmar acuerdos por 18 meses, además de los que condenan a la baja a nuestros salarios. Mientras se adjudican haber reconocido las paritarias (una conquista de los trabajadores), las borran de un plumazo cuando pretenden acuerdos por un año y medio, con topes y en cuotas.


El 27 de marzo -y en la propia Casa Rosada-, los ministros Abal Medina y Sileoni han formalizado su pauta salarial para los docentes universitarios y para todos los estatales, ya que nuestra paritaria es la primera del sector público y la que se pretende utilizar como testigo.


La propuesta es peor que la que Cristina Kirchnner y Scioli impusieron por decretazo, los que fueron contestados con paros y movilizaciones masivas que continúan en Neuquén y Buenos Aires.


La oferta consiste en una primera cuota del 16% en marzo, cuando desde septiembre del año pasado los docentes universitarios hemos recibido 0% de incremento salarial en un cuadro donde la inflación se ha desbocado.La segunda cuota es del 2% en junio. Y la tercera, que llega después de ocho meses, será del 4%. Con estas cómodas cuotas, el gobierno dice alcanzar el techo del 22% que quiere imponer a todos los trabajadores. Ya lo rechazaron los docentes de los niveles primario y medio de todo el país. Ya lo rechazamos las 29 universidades nucleadas en la Conadu Histórica, las independientes y hasta algunas disidentes de la Conadu, con un paro nacional de 24 y 48 horas. Finalmente, el escándalo. Un 7% para todo el primer semestre de 2014. ¡Pero el gobierno, en su ofrecimiento actual, incluye para el semestre de este año un acumulado del 18%! ¿Esperarán que en el primer semestre 2014 la inflación baje a menos de la mitad? Moreno firma “acuerdos de precios” nunca cumplidos cada 60 días, pero el gobierno quiere hacernos firmar acuerdos salariales… por 18 meses.


Exigimos la actualización periódica de los salarios de acuerdo con la evolución del costo de vida. Rechazamos el intento de imponernos un “acta de entrega”. Aquí está en juego la paritaria misma. Es decir, la necesidad de los trabajadores de mantener abierta la negociación salarial ante una inflación creciente que se disparó hace seis años.


Los docentes universitarios nos negamos a ser los que entreguen esta conquista de todo el movimiento de los trabajadores.


La propuesta no dice ni una palabra sobre la derogación del impuesto a los salarios. Es más, dado el congelamiento del mínimo no imponible, más docentes pagaremos el impuesto. Ni una palabra sobre los topes a las asignaciones familiares, por lo que menos docentes cobraremos este ítem. La oferta tampoco incluye la estabilidad laboral o el fin de los ad-honorem. En suma, nos proponen un programa completo de recortes sobre nuestros salarios y derechos.


Las burocracias sindicales de Conadu y Fedun (siguiendo los pasos del “gordo” Lezcano, de Luz y Fuerza) ya se mostraron dispuestas a suscribir un acta de entrega de estas características, puesto que consideran que este acuerdo da “previsibilidad”. En eso tienen razón: el ajuste será previsiblemente garantizado por un año y medio.


Llamamos a todos los docentes, afiliados o no a cualquiera de los gremios, a expresar su repudio a este ofrecimiento, a deliberar y a pronunciarse en asambleas conjuntas contra un acta que es la peor del movimiento docente de todos los niveles. Llamamos a todas las asociaciones de base, delegados y activistas y, en especial, a la Conadu Histórica, a convocar un Congreso de Bases con mandato y a la implementación de un plan de lucha hasta imponer nuestras reivindicaciones. No al 22% en cuotas para 2012. Treinta por ciento ya.