Sindicales

29/8/2019|1562

El 30, todos a la Secretaría de Trabajo

Nueva convocatoria del sindicalismo combativo ante la reunión del Consejo del Salario

La reunión del Consejo y la marcha se desarrollarán en medio de un tembladeral político. Foto: Guilermo Castro

Luego de la importante convocatoria del pasado jueves 22 del Plenario del Sindicalismo Combativo, que reunió a miles de trabajadores desocupados y ocupados, este viernes 30 continúa el plan de acción lanzado por este agrupamiento de organizaciones obreras y sindicatos combativos. Para ese día está pautada la reunión del Consejo del Salario, que debía realizarse el 22, pero que fue postergada por el ministro Dante Sica.


La reunión del Consejo y la marcha se desarrollarán en medio de un tembladeral político, por las tendencias al default y las apretadas del FMI respecto de las condiciones para destrabar un desembolso de 5.400 millones de dólares. Tanto Macri como los Fernández han dado garantías de pago a los acreedores. 


Mientras tanto, el salario mínimo, vital y móvil está en la miserable cifra de 12.500 pesos, lejos de los 31.983 pesos que costaba en julio la canasta básica total para una familia tipo (de acuerdo con datos del Indec). Según las declaraciones del ministro Sica, estiman llevar, por decreto, el mínimo a 16.000 pesos, que es aproximadamente entre un 35 o 36% de aumento. Nada, frente a la desvalorización del salario y el aumento de precios generalizado, más aún tras la fuerte devaluación post Paso.


En este escenario, los reclamos de reapertura de paritarias ya se escuchan en varios gremios del país.


En el caso de la docencia, eliminada la ya limitada paritaria nacional que existía, el salario inicial fue fijado por decreto en un 20% por encima del porcentaje que se cierre en el Consejo del Salario. 


Foto: Willy Monea


Quebrar la tregua sindical, ganar las calles


Vale destacar que, por ahora, el PSC, a través de los sindicatos que lo integran, ha sido el único espacio que ha venido realizando acciones en la última etapa frente a la entrega total de la CGT y CTAs que han llamado a no hacer “olas” hasta octubre, en función de su apoyo a la candidatura y gobierno de los Fernández. Incluso la propuesta de un pacto social de Fernández, con congelamiento de salarios incluido, no fue rechazada por ninguna central.


Roberto Baradel, de la CTA-T y de Suteba, corrió como bombero para apagar el “incendio” de Chubut, a pedido de F-F y del gobernador Mariano Arcioni, en una provincia que está en medio de un levantamiento general de los trabajadores frente a la falta de pagos de los salarios y el corte de la obra social. Este proceso se ha llevado puesto al ministro de Educación y ya se va por la cuarta semana de lucha intensa en las rutas, en las ciudades y en los lugares de trabajo a partir del paro de docentes y estatales, entre otros.


Aún no se llevó a cabo ninguna medida de acción de parte de la Ctera en relación con la lucha de Chubut y sobre el impacto de la crisis en los salarios. Se han limitado a pedir bonos. La CGT ha declarado que pedirá 31.000 pesos como cifra del salario minimo, sin mover un dedo. El cuadro de colaboración con las patronales y con el gobierno y la oposición es total y debe ser superado.


Hay un contraste agudo entre la política de tregua de las centrales sindicales y la política de los sindicatos y organizaciones que integramos el Plenario Sindical Combativo. Los movimientos piqueteros, en especial el Polo Obrero, ya tienen en marcha un plan de lucha por sus reinvindicaciones. Para este viernes  los sindicatos Ademys y AGD-UBA, a partir de resoluciones de asambleas, han convocado al paro con movilización en el marco de la jornada, levantando un planteo integral de cara al movimiento obrero.


Por un paro de 36 horas activo, como inicio de un plan de lucha en el camino a la huelga general, congreso de delegados de base de todos los sindicatos para resolver un programa de reivindicaciones inmediatas. Reapertura de paritarias, indexación mensual automática del salario, salario igual a la canasta familiar, basta de despidos y suspensiones. No pago de la deuda externa, nacionalización de la banca y del comercio exterior, de los recursos naturales y estratégicos.


Con estos planteos y para quebrar la tregua copemos de nuevo las calles este viernes 30 y larguemos una gran agitación nacional para que los trabajadores intervengamos en la crisis de forma independiente a los bloques políticos patronales.