En medio de la sidra y el pan dulce, al presidente Macri le pidió la renuncia a Alfonso Prat-Gay, exponiendo una crisis política al interior de su gabinete.

¿Cuál es el legado del ex ministro para los trabajadores del Ministerio de Hacienda?

Prat Gay profundizó la de precarización laboral que caracterizó a la “década ganada” kirchnerista y la transformó en baluarte para efectuar decenas de despidos a principios de año y, más recientemente, para perseguir a dos trabajadoras, a Romina por utilizar las licencias por maternidad y a Mayra por defender a sus compañeros despedidos.

La Junta Interna de ATE ha desplegado una campaña denunciando un acto discriminatorio frente a una trabajadora que ha utilizado las licencias maternales que establece el Convenio y el lactario dispuesto para alimentar a su hija. Le adjudican cínicamente “baja productividad” como causal de despido.

El caso de Mayra es un grotesco ejemplo de persecución gremial. Fue una de las organizadoras de la lucha contra los 160 despidos que llevó adelante Prat Gay y es actualmente delegada paritaria de ATE. Las autoridades han montado un sumario trucho y sin fundamentos contra ella y tres compañeros más (incluidos un delegado de ATE y otro de UPCN). Su despido debe ser entendido como un ataque a la actividad sindical y pretende ser aleccionador para miles de trabajadores del Estado.

El periodista de TN y La Nación, Nicolas Dujovne, asumirá la cartera el 2 de enero próximo para llevar adelante, a pedido de Macri, un mayor ajuste fiscal. Dujovne promueve la eliminación de un millón de puestos de trabajo en el Estado (aunque no se queja de los 20 mil pesos mensuales que cobra del Senado como asesor del bloque de la UCR). En el ministerio hay casi 4 mil empleados contratados de manera precaria, una espada de Damocles sobre nuestras cabezas si no reforzamos la organización y la lucha. Los despidos de Romina y Mayra no deben pasar.

Las distintas fracciones de ATE, ya alertadas del problema de fondo, deberían hacer una contribución mucho mayor a las luchas en curso. Hasta ahora han tenido una intervención rutinaria frente a un ataque en regla contra la organización sindical. Para que no haya decenas de miles de despidos como en 2016, Tribuna Estatal plantea que la “unidad” que pregonan las directivas de ATE debe ser, no sobre la base de la unión de las cúpulas de la burocracia sindical, sino de un plan de lucha discutido en un gran congreso de delegados de base de todo el país.

La Junta Interna de ATE convoca a todos los trabajadores, sindicatos y organizaciones solidarias a concurrir masivamente el próximo lunes 2 a las puertas del Ministerio para garantizar la entrada de todos los compañeros a sus puestos de trabajo.