Sindicales

26/8/1999|639

El Mst con la directiva carnera

En lugar de repudiar la represión y desnudar las maniobras de la directiva, el Mst hizo causa común con ésta, rompiendo el frente con el activismo.


La directiva de la Obregón movilizó a la Asamblea a elementos carneros, que no venían cumpliendo la huelga. Esto es algo contrario a los principios sindicales. Los carneros no pueden votar el levantamiento de una huelga en la que no acatan las resoluciones de las asambleas del sindicato. Primero se trata de convencerlos de que se pliegan a la misma.


Después de debatir, la Asamblea votó levantar la huelga por 218 votos contra 159 y 30 abstenciones. En un ‘confuso’ recuento, el Mst no sólo votó con la directiva rompehuelga sino que fue un soporte ideológico al proponer que se votara por “un paro por tiempo indeterminado hasta el jueves 19”, contra la moción de mantener el paro por tiempo indeterminado.


La dirigente del Mst anunció públicamente su “autocrítica” por haber apoyado el paro por tiempo indeterminado y por marchar al puente donde fuimos reprimidos. Se arrepentía de “haber llevado a los compañeros a una medida que no podíamos sostener”. Se arrepintió de luchar.


Pero el Mst votó dividido. Una parte de sus pocos militantes no acató la consigna de la dirección. Uno de los que sí la acataron, Moyano, se acercó posteriormente a dar disculpas por haber votado con la directiva carnera contra el activismo. Asimismo, otros militantes estatales del Mst se cruzaban en justificaciones varias y arrepentimientos para reposicionarse ante la bronca del activismo.


La izquierda desmoralizada de Obregón y el Mst se unieron contra el activismo y la huelga.