Desde Radio Universidad del Noreste, y otros sectores del oficialismo, han acusado al Partido Obrero de "funcional" a los radicales, por el apoyo a la lucha docente en la provincia.

Resulta al menos llamativo que desde los medios oficialistas se nos haga semejante acusación, cuando es el propio gobernador el que emplea los métodos de la Alianza, los Rozas y Nikkisch, de represión y ajuste contra la docencia. El gobierno ha designado suplentes en lugar de los huelguistas, una medida ilegal contra la huelga que supera las llevadas adelante por el propio radicalismo y que no encuentra antecedentes desde la última dictadura. La espiral de aprietes culminó en dos represiones en menos de 20 días, que no han logrado quebrar la lucha docente. ¿Qué mejor forma de hacerle el juego a la derecha que buscando quebrar el derecho a huelga, el método por excelencia de los trabajadores para defender sus reclamos? ¿Qué mejor forma de hacerle el juego a la derecha que aplicando un ajuste contra la escuela pública, el salario docente, los comedores escolares y la escuela rural?

La lucha docente es una bocanada de aire fresco para todos los trabajadores que sufren día a día la miseria salarial de una provincia cuyo salario promedio no llega a la mitad de la canasta familiar.

El Partido Obrero se enorgullece de acompañar la lucha de los docentes, porque levantan las banderas de todo el pueblo: la defensa del salario y la educación, y el primero de todos los derechos, el de defender los reclamos populares. Las aspiraciones de los docentes y los trabajadores del Chaco nunca podrían ser llevadas a término por una oposición que reclama una devaluación de la moneda y aplica un ajuste, con tarifazos e impuestazos, en los distritos donde gobierna (Resistencia). El intento de medrar con la lucha docente para favorecer los intereses de esta oposición está condenado al fracaso, porque sus representantes son enemigos jurados de los reclamos populares, como el ex Ministro de Educación y represor Verdún. El Partido Obrero rechaza esta variante y defiende una salida de izquierda a la crisis actual, basada en la defensa incondicional de los reclamos y aspiraciones de los trabajadores, los estudiantes y todo el pueblo.

Reclamamos el cese de las persecusiones y la represión contra los docentes, la satisfacción del reclamo salarial de la docencia y de todos los trabajadores de Chaco, la triplicación del presupuesto educativo y el cese del ajuste contra la educación. Defendemos el derecho a huelga y apoyamos toda la fuerza del reclamo de los docentes.