Sindicales

10/12/2009|1112

El PTS insiste en meter ceramistas en la CTA

El 14 de noviembre se realizó en Neuquén el plenario convocado desde el Bauen por el PTS y la lista Marrón del sindicato ceramista. La Marrón llevaba como propuesta el ingreso del sindicato que dirige en la CTA. Aunque el punto no fue debatido durante la reunión, en las resoluciones reproducen literalmente el párrafo respectivo tal como figuraba en la convocatoria: “la lucha (…) tomará formas particulares en cada gremio o provincia”, (en Neuquén)… “el ingreso del Soecn a la CTA regional, que agrupa a los docentes y la enorme mayoría de estatales que han protagonizado las principales luchas de la provincia en los últimos años (…)”. El Sindicato Ceramista está en la CGT. El salto a la CTA implica una señal política, ideológica, a favor de la CTA para todos los trabajadores, de Neuquén y del país, en la medida que ceramistas y Zanón integran el pelotón de direcciones antiburocráticas emergentes desde al Argentinazo a esta parte.

Es falso que haya más “miles que luchan en la CTA que en la CGT”. La CTA también es minoritaria en Neuquén. Es minoría incluso entre los estatales, como acaba de reconocer de hecho Contreras (ATE) al aceptar una representación menor que UPCN en la paritaria del gremio. Tampoco tiene la “exclusividad de las luchas”: la parcialidad del PTS deja fuera de su “análisis” las grandes huelgas, ocupaciones, piquetes y asambleas (que a la CTA no le movieron una pestaña) de petroleros, Uocra, obreros de la fruta, rurales y municipales, todos enrolados en la CGT.

La CTA nacional es una burocracia firmemente establecida, dividida entre el apoyo al gobierno y a la Mesa de Enlace, policlasista, regimentada y un baluarte del régimen –en la que también están “enrolados los docentes y estatales que protagonizaron grandes luchas en los últimos años” a pesar y en contra de los Baradel, Yasky y Michelli. En Neuquén se reproduce esta realidad al milímetro, pero sobre todo esto el PTS no abrió el menor debate en Zanón y tampoco en el encuentro.

Agreguemos que tampoco le respondieron sobre el punto a Pitrola en la Mesa de Marxismo 2009. Allí, Pitrola realizó un balance del encuentro del 2 de abril del 2004, convocado para “coordinar las luchas”, sin caracterización ni programa común de ningún tipo, señalando que se rompió antes de terminar para dar nacimiento al MIC. En este encuentro de Neuquén, el PTS fue más lejos en la confusión: lo dividió en dos tramos. El primero, de coordinación de las luchas, con invitados, que resultó una formalidad. Los invitados son importantes cuando van a participar de un debate político que marca una caracterización del poder, se define frente a él, frente a las fuerzas que disputan en los sindicatos y en la provincia, donde se discute una salida. No fue el caso, siquiera de la segunda parte, donde quedaron los simpatizantes del PTS a discutir una herramienta política en la que el PTS “se disolvería si se forma”.

Políticamente, la CTA neuquina no es neutra; al contrario, actúa con un brazo político: el UNE. Se trata de uno de los pilares del gobierno municipal de la capital que encabeza el radical Martín Farizano en alianza con el PJ. Un gobierno capitalista, rabiosamente antiobrero, que apoya la represión a las ocupaciones de tierras y le descuenta los días de huelga a los municipales.

La “constituyente social” del siempre incipiente “movimiento político” de De Gennaro montó su carpa en la provincia justamente para elevar al UNE como “modelo de construcción política”, lo cual es muy ilustrativo de su orientación política y de clase.

La CTA neuquina aisló las luchas de los docentes, estatales y trabajadores de la salud en forma sistemática. Nunca se planteó desarrollar una lucha de conjunto ni convocar a un congreso de delegados de base con ese objetivo. ¿Puede decirse menos de la CTA nacional?
Ahora bien, nada garantiza cómo actuará la CTA respecto del PTS ¿Acogerá al Soecn para que éste “cave trincheras” en su seno o procederá como en el caso del Suteba La Plata, aislando a los clasistas por medio del fraude y la complicidad del Ministerio de Trabajo?

La izquierda que pretende crecer bajo el alero de la CTA ya fracasó: se llamó MIC. Ahora, sus principales dirigentes son de la CTA, operan por la “paz social” en el subte y por la unidad con el moyanismo desde Foetra Buenos Aires. El PTS tropieza con la misma piedra.