Sindicales

22/8/2002|768

El Soip (es) de los trabajadores

¡Y al que no le gusta se jode!

Una impugnación que ordena la re-convocatoria electoral en doce fábricas ha determinado el desconocimiento de la actual Directiva del Soip, por parte del Ministerio de Trabajo.


El argumento para semejante provocación sería que 95 obreros (empadronados en estas fábricas) no emitieron su voto, y como la diferencia entre la lista ganadora (Celeste) y la segunda (Blanca) fue de 53 votos, la aplicación de la resolución del Ministerio podría modificar el resultado general de la elección.


Las acciones jurídicas emprendidas por la Directiva del Soip y los abogados del Polo Obrero destrozan este argumento.


En las elecciones del Soip votaron todos los que estaban habilitados y quisieron hacerlo.


Una parte importante de los que se abstuvieron (en esas 12 mesas) manifestaron por escrito que lo hicieron por su propia voluntad y bajo su responsabilidad.


Específicamente, 34 de los que (supuestamente) se vieron privados de votar en realidad lo hicieron en las mesas donde fueron designados como fiscales y autoridades de la elección.


Así, la Camaño y sus asesores legales han quedado virtualmente en ridículo. Despojados de su ropaje democrático, queda al desnudo el intervencionismo pro patronal del Ministerio de Trabajo.


Pero la Camaño no sólo enfrentará acciones judiciales, sino un proceso de movilización integral de los obreros del pescado que ya está en marcha.


Una nutrida columna del Soip ocupó durante la mañana del 6 de agosto la Delegación Territorial del Ministerio de Trabajo, reclamando el cese de las obstrucciones que impiden la recuperación de su Obra Social.


Está en marcha una campaña de organización e inspección de las cooperativas truchas contra el fraude laboral.


Luego del 30% de aumento salarial obtenido, se han acumulado atrasos salariales correspondientes a junio y julio. Esta vez la demanda de actualización lleva la firma de los 6 gremios de la Intersindical Marítima y Portuaria.


Como se ve, cualquier intento de intervención será recibido como se merece: con un gremio movilizado en defensa de sus intereses y respaldando a una Directiva que, aunque a la Camaño no le guste, los obreros del pescado eligieron para dirigir el Soip.