Sindicales

11/4/1995|443

En defensa de los convenios colectivos de trabajo

En los supermercados COTO, la patronal ha lanzado una campaña de presiones sobre sus trabajadores para imponer el trabajo obligatorio en sábados y domingos, sin necesidad de pagar extras, ni ningún otro tipo especial de compensación (doble franco semanal etcétera). Pretende que cada trabajador, en forma individual, firme un “convenio” en el que “las partes acuerdan modificar hacia el futuro las condiciones de trabajo”. Así, “el descanso hebdomadario correspondiente a ‘el empleado’ tendrá lugar durante los días de semana (con excepción de los días Sábado y Domingo)…”.


El descanso dominical y la conquista del sábado inglés desaparecen. A la patronal no le importa en lo más mínimo la vida de la familia trabajadora, que no tendrá de esta manera ni siquiera la posibilidad de un día a la semana para estar junta. El trabajador se transforma en un apéndice de las necesidades de la producción capitalista, y pierde todos sus derechos y conquistas sindicales. Lógicamente, esto implica también la desaparición de todo tipo de convenio colectivo de trabajo, aun a nivel de empresa, puesto que la patronal de COTO lo intenta hacer firmar individualmente a cada trabajador. Esta es una nueva muestra de la política de “flexibilización laboral”, es decir, de pérdida de conquistas y súper explotación menemista-capitalista. La organización sindical de los Empleados de Comercio, dirigida por Cavalieri, está “borrada”, organizando sus “curros” con los empresarios (jubilación privada, etcétera). La casi totalidad de los trabajadores está dispuesta a rechazar esta presión patronal y no firmar el nuevo “convenio individual”. Lo que se plantea es organizar a los trabajadores del COTO en comisiones por sucursal y formar una coordinadora de todas ellas, para garantizar el rechazo masivo, defenderse contra cualquier intento de represalia patronal y poner en pie una auténtica organización de defensa sindical de los trabajadores del supermercado.