Sindicales

24/6/2005|905

En Fiel (Metrovías) se extiende la lucha

A la lucha de los trabajadores de control de evasión del subte (arrancaron un aumento de 300 pesos más cien de tickets), se suma ahora un proceso de organización de los trabajadores del Ferrocarril Urquiza, de la misma actividad.


Es que los sueldos que paga Metrovías a estos compañeros son paupérrimos. Aún trabajando entre 8 y 10 horas por día no superan la línea de pobreza.


Para mantenerlos en estas condiciones, Metrovías los hace pasar como la seguridad, imponiéndoles el convenio de los vigiladores, mucho más flexible que el de la Unión Ferroviaria.


Por ejemplo, autoriza el trabajo de doble turno si no llega el relevo, apelando a diversas amenazas.


Por otra parte, estos sindicatos totalmente propatronales, como el de vigiladores o maestranza, separan a sus trabajadores de sus compañeros en los lugares de trabajo.


Como si esto fuera poco, Metrovías inventó una tercerización trucha, que le permite inflar los gastos operativos (dice pagarle a cada vigilador de Fiel 2.500 pesos) para justificar los 65 millones de pesos de subsidios que recibe del Estado.


Cualquiera que viaje en el Urquiza sabe que los trabajadores de Fiel cumplen la función de control de evasión. Para la seguridad, se supone, están los gendarmes.


Luego del conflicto del subte, la patronal se aprestó a retirarles el carnet identificatorio que decía “Metrovías, control de evasión” y se lo cambiaron por otro que dice “Fiel”.


Si aún no queda claro, el que está negociando con los trabajadores es el gerente de Metrovías, que antes era supervisor de Fiel, y los telegramas de intimidación enviados a los compañeros del CIR (otra supuesta tercerizada que trabaja en el tren y en el subte) fueron firmados por “Metrovías S.A.”.


Esta cuestión es el corazón del conflicto. Cualquier reagrupamiento de lucha debe girar en torno a esta denuncia, ya que el incremento salarial solo puede ser el primer paso para ir por el pase al convenio de la UF.