Sindicales

23/3/2000|659

¡Fuera!

El gobierno aliancista acaba de intervenir la Conadu. El delegado interventor es un abogado del estudio jurídico que asesora en temas sindicales, a Shuberoff, rector de la UBA y de cuyo seno salieron también paritarios que representaban al CIN en la paritaria nacional.


La medida fue resuelta 48 horas después de un paro masivo de los colegios preuniversitarios a nivel nacional, en reclamo del cobro del aumento de 60 pesos.


El propósito inocultable es por lo tanto quebrar las luchas crecientes de los docentes universitarios y convertir a Conadu en un apéndice del Rectorado.


La Alianza ya había sido protagonista en la división de Conadu dos años atrás, cuando sus representantes más prominentes, frepasistas ellos, montaron una asociación trucha en la UBA y en otras universidades del conurbano, y culminaron rompiendo el Congreso Nacional de Conadu que debía elegir autoridades. A partir de entonces la Conadu quedó partida en dos.


Con la asunción del gobierno, la Conadu ‘aliancista’ se transforma en una agencia gubernamental directa. El secretario general de Aduba trucha es Coordinador General de Gestión en la Secretaria de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación. Otra dirigente del sector ocupa un importante cargo en el Ministerio de Trabajo, lo que revela su completa descomposición.


Al momento de escribir este artículo estaban reunidos los Secretarios Generales de Conadu donde la legítima asociación docente de la uba (AGD) plantea la convocatoria a un paro general y acto, en repudio a la intervención, por las reivindicaciones docentes y contra la reforma laboral.


De esta forma el gobierno aliancista no sólo mantiene el congelamiento salarial del menemismo, sino que está dispuesto a un ataque mayor contra los docentes universitarios. Lo que no se animó en 10 años Menem, intervenir un sindicato nacional, lo hace en 3 meses de gobierno la Alianza.


Conadu rechaza la intervención


Con la firma de numerosas organizaciones de base, la Conadu “rechaza todo intento de intervención por parte del Ministerio de Trabajo”. “Son los mismos que influyen para que el gobierno abra las puertas a la burocracia sindical, la misma que entregó los derechos laborales y fue cómplice del gobierno que se fue. Esos son los que se preocupan por intervenir en la interna de un sindicato que lucha y no entrega a los trabajadores”.