Sindicales

24/3/2020

Gastronomía y turismo en Mendoza: el coronavirus destapó la olla

Despidos, cierres, miles de trabajadores sin saber cómo subsistir.

El rubro de gastronomía y turismo, siempre íntimamente ligados, es de los sectores productivos que más ha crecido en la última década en toda la provincia de Mendoza. En el año 2018 representó el 6% del PBG (producto bruto geográfico) de la provincia y hoy llega a emplear a más de 40.000 personas. Su característica principal: la informalidad.


Según el Diario Uno (21/03) en Mendoza el 50% de los trabajadores del sector está en la informalidad, es decir, en negro. También es sabido en el ambiente que, de los trabajadores en blanco, la mayoría solo está registrada por media jornada y no por la jornada entera. Este secreto a voces fue ignorado históricamente por las autoridades provinciales debido a la enorme influencia económica que el sector tiene en la Provincia.


Es esta situación de base la que hace que la cuarentena por la pandemia del coronavirus impacte de manera estrepitosa. El cierre en plena temporada de todos los bares, restoranes, hoteles y shoppings ha generado que más de 20.000 empleados gastronómicos mendocinos, en su mayoría jóvenes, se queden sin su fuente de sustento y con la incertidumbre de si al finalizar la cuarentena podrán volver a sus puestos de trabajo.


En algunos casos, los menos, las patronales han adelantado la quincena, pero no han confirmado si seguirán trabajando.


Este no es el caso de un joven de 28 años, empleado en un conocido bar de la Arístides, que brindó su testimonio a Prensa Obrera: “como ya venía bajando el número de clientes, desde el lunes 16 nos redujeron la jornada a la mitad y nos dijeron que sólo pagarían las horas trabajadas. Después, desde el jueves 19 directamente me suspendieron sin paga hasta nuevo aviso, a menos que hubiera algún anuncio de subsidio. Encima me deben febrero.”


Otro testimonio ejemplificador es el de una joven estudiante del sur provincial: “en el bar trabajamos hasta el miércoles 18. Esa semana casi no tuvimos clientes a causa de la cuarentena. Veíamos a Gendarmería pasar por las calles con altavoces pidiendo a la gente que se aísle, mientras nosotros sacábamos las mesas para abrir el bar. El jueves se nos informó que no íbamos a trabajar, al día siguiente nos repartieron mercadería sobrante para que no se eche a perder y el sábado nos pagaron las horas que habíamos trabajado y un "extra" con un valor del 50% de esas horas que trabajamos, aproximadamente. Actualmente no sabemos cuándo vamos a volver a trabajar ni de qué vamos a vivir ya que nuestros sueldos salían de las ganancias del bar, por semana”.


Frente a esta situación sin duda angustiante para tantos trabajadores y trabajadoras, planteamos en primer lugar la necesidad de organizarnos, desde ahora y en adelante. Conservación de todos los puestos de trabajo al día 1° de marzo, con la paga completa del mes y de todo el tiempo que dure la cuarentena. Plan para efectivizar a todos los trabajadores informales, bajo convenio gastronómico. Salario mínimo de convenio igual a la canasta familiar.


Con este programa, nos proponemos llegar, con los medios virtuales a nuestro alcance, a todos los trabajadores que se encuentren en esta situación. ¡Te invitamos a sumarte, a completar el formulario y a organizarte con nosotros!