Sindicales

15/11/2002|729

Gatic es viable

Defendamos los derechos de los trabajadores

Gatic -que produce ropa deportiva con licencias de marcas como Adidas, Le Coq Sportif, etc.- se presentó en convocatoria de acreedores. Tiene fábricas distribuidas en todo el país (Coronel Suárez, Pigüé, San Martín, La Rioja, etc.) con una dotación de 6.000 obreros. En la planta más importante, la de Coronel Suárez, la gran mayoría de los 1.700 trabajadores están ‘suspendidos’. La planta San Martín directamente ha sido cerrada.


A los trabajadores se les adeudan 7 quincenas y van cobrando de a 100 pesos por semana. También hay un tendal de proveedores que no cobra.


Con la convocatoria, Gatic va al desguace ya que “perdería automáticamente la licencia de Adidas, su principal fuente de recursos, que vence a fin de año” (La Nación, 21/7).


La patronal (la “familia” Bakchellian) ha embolsado una infinidad de subsidios. En primer lugar los de “promoción industrial” por los que no pagaba impuestos. Recientemente, Ruckauf estatizó 900 millones de dólares de préstamos del Banco Provincia considerados incobrables. Entre ellos, 29 millones adeudados por los Bakchellian, que pagará el pueblo trabajador de la provincia.


En una solicitada (11/10) Eduardo Bakchellian, el “fundador de Gatic”, se presenta como víctima de las políticas del menemismo y el delarruismo y reclama más subsidios. Por eso saludó el salvataje de las empresas quebradas que acaba de lanzar Cavallo: las deudas bancarias de los industriales se podrán pagar con títulos públicos que se compran a su valor de mercado (50%) pero a los que el Estado les reconoce su valor nominal (100%). “Habría que ver la reglamentación, pero es evidente que el salvataje de las empresas nos vendría bien y haría justicia, después de todo lo que ha sucedido en los últimos años” (La Nación, 3/11).


Sin embargo, hay versiones de que ellos ya están trasladando parte de la industria a Brasil, para empezar “de nuevo” dejando aquí un tendal de quebrados y de desocupación y miseria. En cualquier caso, en las fábricas residuales que quedarían en pie se pretende aplicar a fondo medidas de reducción salarial y flexibilización laboral, esto es, de superexplotación.


La burocracia sindical del Sindicato del Caucho ha hecho causa común con Bakchellian, convirtiéndose en gestora de préstamos y subsidios para la patronal y olvidándose de los obreros que debiera representar.


El Partido Obrero de Coronel Suárez sacó un volante planteando que “Gatic es viable” porque “las zapatillas son viables (todos tenemos dos pies)”. El PO suarenze reclama “que se abran los libros contables de Gatic” para que los inspeccione una “comisión bajo control obrero” y se determine los negociados existentes. Que “el Estado se haga cargo de la empresa” para ponerla en marcha bajo control obrero. “Que se garantice el inmediato pago de sueldos de los trabajadores, afectando el patrimonio familiar de los Backellian”. Nos oponemos a toda reducción salarial, reclamamos un régimen de trabajo insalubre en las secciones de elaboración del caucho. Es necesario avanzar en las ciudades que dependen de las fábricas Gatic (Coronel Suárez, Pigüé, etc.) hacia la convocatoria de Asambleas Populares para defender los puestos de trabajo y a Asambleas Generales en cada fábrica e Intersindicales para que Gatic no cierre, que se mantenga el 100% de los puestos de trabajo, sin rebajas salariales ni pérdida de conquistas, y que se paguen de inmediato los haberes adeudados.