El sindicato bancario realizó una movilización nacional por el microcentro el pasado jueves 22 que congregó a más de tres mil bancarios, en reclamo de reapertura de paritarias, por la derogación del impuesto a las ganancias y contra el terrible proceso de ajuste que se vive en los bancos, incluidos los públicos.

 

La gran convocatoria incluyó principalmente a las comisiones internas de los diferentes bancos y a los integrantes de las seccionales del sindicato, ya que al no convocarse una medida con interrupción de tareas impidió la participación masiva de los bancarios que no podía abandonar los lugares de trabajo.

 

El acto de apertura de la marcha contó con la presencia de Pablo Moyano del sindicato camionero, quien aseguró que no existía margen para que el confederal de la CGT del día siguiente no llamara a un paro general. 

 

La realidad demostró a Moyano como un charlatán ya que, 24 horas después la CGT no convocó a nada (“paro sin fecha”), manteniendo la tregua indefinida con el macrismo y los gobernadores. Una dosis más del camino entreguista que vienen recorriendo frente al ajuste en marcha.

 

Por su parte, Palazzo anunció la realización de asambleas con interrupción de atención al público para el 28 y 29 en el marco de un plan de lucha que irá intensificándose conforme no se reabra la discusión paritaria.

 

En el acto, Palazzo también denunció la toma de deuda de 5900 millones de pesos por parte del Banco Provincia como un negociado del macrismo respecto de la remodelación de sucursales. Un ángulo que busca encubrir tanto al sciolismo que manejó el banco hasta el 10 de diciembre pasado, como a la administración de Vidal en cuanto al vaciamiento de más de 20 mil millones de pesos de los últimos años, que ambos sectores buscan cubrir con deuda y ajuste sobre los trabajadores.

 

Desde Tribuna Bancaria entendemos que esta enorme movilización muestra que el gremio bancario está dispuesto a enfrentar el ajuste en las calles con paro activo y plan de lucha por todas nuestras reivindicaciones. Debemos aprovechar a fondo las asambleas de miércoles y jueves para votar el paro activo. Sólo parando los bancos aportamos a un plan de lucha nacional del conjunto del movimiento obrero.