El día 26 de abril se cumplió la primera de las tres jornadas de lucha decididas por los gre­mios AEDGI y SUPARA (que agrupan a los tra­bajadores de la ex DGI y la ex Aduana, respecti­vamente), a nivel nacional. El paro contó con un gran acatamiento, tanto en la DGI (85%) como en la Aduana (92%).

Frente a la rotunda protesta, el Administra­dor General de la AFIP, Carlos Silvani, solicitó la conciliación obligatoria al Ministerio de Tra­bajo por el término de 15 días hábiles. Esta me­dida fue acatada por ambas direcciones sindica­les.

La Comisión del edificio del Banco Hipoteca­rio Nacional (constituida por la CGI de Informá­tica, delegados y representantes de varios pisos del lugar) tuvo su “bautismo de fuego” durante esa jomada y en las vísperas, realizando asam­bleas de sector y generales del edificio, en las que se votó efectuar las medidas dispuestas; además, se decidió desplazarnos en pleno a áreas donde había presiones de las jefaturas, co­mo el área de Grandes Contribuyentes, y efec­tuar una marcha por los distintos pisos llaman­do a adherir a las medidas de fuerza, sumando a alrededor de 300 empleados. Es importante destacar que estos hechos son inéditos en la his­toria de los trabajadores de la AFIP.

Finalmente, sabemos que el conflicto está le­jos de haber terminado, pero se logró detener los 4.000 despidos previstos, al menos por ahora. La Comisión del edificio plantea el fortalecimiento sindical en base a elegir representantes de las áreas que aún no lo tienen. Esta tarea será fun­damental para enfrentar los tiempos posteriores a la conciliación obligatoria.