Sindicales

11/1/2001|694

Gran triunfo clasista en camioneros postales

Antes de que terminara el año, los postales camioneros de la empresa Epsa obtuvieron un trascendente triunfo clasista. Por 53 a 26 ganó la lista de delegados que encabeza Juan Carlos Cabral, gran activista de la lucha contra los despidos, la flexibilidad y los cierres de empresas.


Es que en esta rama, la de correos privados, la lucha de clase levanta temperatura hace tiempo. En el 2000 cerraron más de 50 empresas, como parte del brutal proceso de concentración monopólica del área. Pulpos como Correo Argentino de Macri, OCA de Exxel, y Andreani operan para quedarse con toda la torta.


No es de extrañar entonces el interés patronal para desplazar a los dirigentes de todo un sector combativo que pugna dentro de la rama camionera postal para defender el convenio y evitar los cierres, enfrentando el “marco regulatorio” del gobierno fondomonetarista. Hubo todo tipo de presiones para que se levantara la lista combativa. Presiones y algo más, para que se forme otra lista. La elección se hizo con la patronal merodeando la urna, bajo amenazas de despidos, cierre y otras calamidades si ganaba la lista clasista.


Por otro lado, las urnas se retiraron, por dos horas, del lugar de votación hacia el sindicato, para reabrirse más tarde durante una hora. El anunciado paréntesis alarmó a los compañeros que buscaron todo tipo de garantía legal ante el Ministerio de Trabajo, realizaron pedidos de solidaridad sindical para una elección limpia, colocaron un escribano para registrar la salida de las urnas y fiscalizaron como leones.


Se logró una elección limpia donde votó el 90% del padrón y el 67% lo hizo por la lista independiente de la patronal.


El activismo postal vivió con atención esta elección y hasta la siguió en vivo y en directo ese viernes 22 de diciembre, ya que la mayoría de los delegados estaban en el sindicato porque es su día de reunión. Grande fue la conmoción por el triunfo de Cabral y Araujo, que refuerza la lucha de toda la rama. Para soldar los lazos de lucha de todas las vertientes del pensamiento postal camionero sería muy bueno que, aunque cueste un poquito de esfuerzo de espera, las urnas no se desplacen hasta después del escrutinio en el lugar de votación, tal cual lo marca el código electoral nacional, que rige como norma testigo en todo tipo de elecciones.


Algo bueno ocurre en esta rama de camioneros. Los dirigentes reúnen a los delegados semanalmente, un poderoso mecanismo de organización colectiva si se lleva adelante con libertad de expresión y en forma resolutiva. Con delegados decididos como éstos, con un programa obrero para el sector, la rama puede obtener victorias de extraordinario valor. La derrota del marco regulatorio que implica miles de despidos, la derrota del Exxel y de Macri (que después de despedir y rebajar los salarios, ahora no los paga), la defensa de un convenio digno y un salario mínimo de 600 pesos para toda la actividad, tienen trascendencia contra toda la desocupación y contra toda la flexibilidad en la Argentina.


Felicitaciones compañeros.