Cerca de 500 contratados y “ayudas financieras” de 28 de Noviembre ocuparon ese municipio por 22 días por el pase a planta. Muchos llevan seis y siete años en esas condiciones. La protesta fue autoconvocada, más tarde llegó ATE y afilió a muchos compañeros apoyando el reclamo. El SEM (sindicato municipal oficialista) se negó siempre a afiliar a los contratados. Estos burócratas fueron los grandes perdedores porque actuaron como brazo del Ejecutivo municipal tratando de desactivar la lucha.

El FUT-Partido Obrero se puso al hombro la solidaridad popular con el conflicto, participando en la toma e impulsando el movimiento de apoyo en todos los frentes. Las marchas de apoyo fueron creciendo con el correr de los días, incluso hubo escuelas que tuvieron que suspender clases por la medida del personal en conflicto. La dirigencia política (concejales, intendente, diputado por pueblo y hasta el senador de la Nación Banicevich, que es de nuestro pueblo) estuvo en contra de los obreros y empleados municipales.

El domingo 5 de diciembre se realizó una asamblea comunitaria en la escuela 32, donde estuvieron presentes más de 250 vecinos y allí se ratificó un “paro comunitario” para el martes 7, invitando incluso a los comerciantes de la localidad a cerrar sus puertas ese día. Los docentes se suman al paro de ese martes con una actitud solidaria acatada por el 83% de los maestros (histórico en la comuna) y la asamblea comunitaria determinó movilizarse y cortar la ruta 40 en esa jornada. Esto dio mayor fuerza a los compañeros en lucha para continuar y quedarse en la ruta. Como estrategia, días después levantaron y bloquearon el corralón municipal, no dejando salir ningún camión ni móvil de la Municipalidad.

El día del paro comunitario, el gobierno pareció quebrarse y emitió un decreto y una ordenanza, por unanimidad, donde prometía algunas dudosas mejoras en las formas de contratación. Los trabajadores rechazaron la ordenanza y exigieron una mesa de negociación y el reconocimiento de los nuevos delegados, así como de la representación legal como ATE, que a esta altura ya contaba con 200 afiliados en el municipio.

El día del paro contra la reforma jubilatoria, los huelguistas encabezaron el repudio a la patota de la Uocra de Gallegos.

Debieron sentarse a negociar con los normalizadores de ATE, un trabajador de planta permanente, uno de ATE provincial, uno de la burocracia amarilla del SEM de 28 de Noviembre, la Secretaría de Trabajo y el intendente, quien tuvo que firmar un acta compromiso: contratados provinciales a una nueva figura: planta transitoria municipal respetando la antigüedad y posibilidad de pasar a permanente a los seis meses, a las “ayudas financieras” el empleador les realizará los aportes correspondientes con la promesa que se mejorará el sueldo a partir de marzo, según la recaudación municipal. Con la organización que se han dado, ya plantean ir por más. Un gran triunfo de los compañeros. Queda por delante la tarea de legalización del cuerpo de delegados y la batalla de fondo por el pase a planta. Un gran triunfo obrero con las banderas de Mariano.