Los trabajadores del Ente de Mantenimiento Urbano Integral (Emui) estamos sin tareas desde hace más de un mes.

El gobierno quiere desmantelar varios talleres y para lograr este objetivo pretende cerrar la usina de asfalto, que es el corazón de todos los sectores relacionados con pavimento. Si el macrismo logra su objetivo, cientos de compañeros van a ser trasladados y cambiados de funciones, lo cual es un despido encubierto.

El sindicato nos dice que está garantizada la continuidad de los compañeros contratados, a lo cual nosotros respondemos: si no tenemos trabajo y funciones específicas, el gobierno se va a agarrar de este punto y a fin de año, cuando se termina la mayoría de los contratos, los va a rescindir sin pena ni gloria con la excusa de que somos ñoquis.
Pero en los talleres centrales de Uspallata, con la toma y movilización, lograron defender el predio y siguen trabajando.

Los estudiantes secundarios, con la movilización, le arrancaron al gobierno las becas que no otorgó a principios de año.

Nosotros también podemos:
Realicemos asambleas en todos los lugares de trabajo.
Vayamos al gremio a discutir un plan de lucha.
No al cierre de la usina.