Sindicales

29/9/1994|428

Hicimos un frente con el CTA

En el sindicato bancario de Capital y Gran Buenos Aires se ha logrado una importante victoria política como consecuencia de la aceptación por parte del CTA de un frente con la izquierda para las próximas elecciones gremiales. Aunque esta unidad tiene un alto componente contradictorio, el hecho de obligar al CTA a presentar una oposición única contra Zanola, es un gran paso adelante. El CTA se había negado en el pasado a establecer acuerdos electorales con la izquierda. Aunque en aspectos incluso muy importantes la cúpula del CTA se encuentra mucho más cerca de Zanola que del clasismo, una derrota de Zanola sería una victoria para el conjunto de los intereses sindicales bien entendidos y permitiría exponer a la luz del día las limitaciones del programa del CTA, cuya composición interna es, por otra parte, extremadamente contradictoria. Las agrupaciones de izquierda que integran la lista opositora única conservan naturalmente toda la libertad para exponer su programa de reivindicaciones. La lista Naranja, por ejemplo, que es apoyada por el Partido Obrero, se encuentra desenvolviendo en la actualidad una vigorosa campaña contra la liquidación de la Caja de Jubilaciones del Banco Provincia y contra el intento de reducir los beneficios que corresponden a sus jubilados,  una campaña que enfrenta la oposición de la comisión gremial interna del banco, que responde al CTA.


La junta electoral, controlada por Zanola, ya comenzó su actividad de proscripciones, impugnando a 44 integrantes de la flamante lista Azul-Grana. Los activistas se están movilizando para impedir la ilegalización de la lista. Es necesario asegurar la cristalización de una polarización entre el cegeto-menemista Zanola y  la oposición del centro-izquierda y el clasismo, como primer paso para movilizar a los bancarios para derrotar a Zanola en las urnas —una tarea harto difícil por los escollos fraudulentos que habría que superar.