Sindicales

26/11/2015|1391

Hospital Gandulfo de Lomas de Zamora

Un posible Cromañón


Entrevista con Aída, secretaria administrativa y de actas electa de ATE Sur, trabajadora del Hospital Gandulfo.


 


-Aída, ¿qué ocurrió en el hospital?


 


-El incendio comenzó el domingo, cerca de las 10:30 u 11 de la noche, en el servicio de Cuidados Progresivos. En ese momento había una sola enfermera para atender 15 habitaciones distintas, con 18 pacientes internados. La enfermera pidió ayuda a gritos. Trabajadores de otros sectores del hospital acudieron al rescate de los pacientes. El humo, mientras tanto, avanzaba y penetraba en otros sectores del hospital. Comenzaron a evacuarse otros sectores. De los cuatro ascensores existentes, sólo uno funcionaba. Se envolvió a los pacientes en sábanas y se los arrastró por el piso para evitar que el fuego los alcanzara. La situación fue desesperante. Las mangueras disponibles eran muy cortas y no llegaban al fuego. El servicio de emergencias contra incendios no se activó y tuvimos que usar los siete matafuegos que teníamos, los cuales se acabaron en unos pocos instantes. Al mismo tiempo, no podíamos siquiera llevar el humo para afuera porque las ventanas están selladas, sin perilla. Se llegó a un punto tal de crisis que algunos pacientes se arrojaron por su cuenta al suelo para rodar y evitar morir quemados.


 


-¿Qué explicación dieron el gobierno y las autoridades del hospital?


 


-Los directivos del hospital afirman que se trató del cigarrillo de un paciente lo que provocó el incendio. Nosotros, como trabajadores, impugnamos esa versión, porque vimos cómo salían chispas de los tableros de electricidad que hay arriba de cada una de las camas de los pacientes. El director del hospital y el gobierno de la provincia de Buenos Aires están ocultando lo que nosotros venimos denunciando hace ya mucho tiempo. Desde el Ministerio de Salud, donde estuvimos la semana pasada, el ministro Collia dijo que “estaba al tanto”. Garrido, jefe de Gabinete, ninguneó el hecho de que haya pacientes con quemaduras graves y en terapia intensiva. “Son unas quemaduritas”, dice Garrido, pero los familiares afirman lo contrario.


 


-¿Cómo sigue esto?


 


-Los trabajadores estamos en estado de asamblea permanente por los siguientes reclamos: creación de salidas de emergencia (sólo hay una en todo el hospital), ramblas para camillas, señalización de los pisos, que funcionen las llaves de emergencia, apertura de las ventanas. Hacemos responsable de esta tragedia, que generó heridos y destrucción, al directorio del hospital y al gobierno de la provincia de Buenos Aires, quienes no escuchan nuestros reclamos sobre la falta de inversión en la prevención de tragedias o, siquiera, en la solución de ellas en caso de que ocurran.