Impactante movilización y paro en Santa Cruz

El paro del 31 fue una jornada muy importante en Santa Cruz porque pararon docentes, estatales, municipales. La tensión continuará en los días que siguen por la lucha en torno del salario. La movilización en el centro de la capital se replicó en otras localidades y los porcentajes de paro fueron muy altos. Entre los gremios de la CGT, los camioneros realizaron piquetes en los accesos a las ciudades, tanto en Río Gallegos como en lugares clave de la zona norte como Las Heras, con lo cual los petroleros que trabajaron lo hicieron en las bases. En el sur, uno de los gremios petroleros, paralizó la producción. El repudio a la conducción del gremio petrolero, dirigido por Sergio Vidal, ha sido enorme por no adherir al paro. En cambio, en Comodoro Rivadavia, un plenario de delegados resolvió sumarse a la huelga en el sindicato dirigido por Jorge Avila y el paro fue masivo.


El jueves 26, convocados por Adosac y ATE en el marco de la CTA, se realizó una movilización provincial con más de 2.500 docentes y estatales, de los cuales cerca de 300 llegaron de distintos puntos de la provincia. La marcha fue concebida como rechazo al intento del gobernador  Peralta, de cerrar la discusión salarial en alrededor del 25% en tres cuotas, además de temas como el abandono de las escuelas y la grave crisis de la obra social provincial, intervenida desde hace 25 años por el gobierno.


 


La movilización, de más de cinco cuadras, no se veía aquí desde 2007. El entusiasmo de los participantes era enorme y por eso plantea el desafío de cómo seguir la lucha salarial.


 


Ante la traición de los paritarios de Apap y UPCN, que aceptaron la oferta salarial, ATE se limitó a firmar en disconformidad el acta, y salió a proponer el paro de 48 horas sólo como “protesta”.


 


Amplios sectores de bases y dirigentes medios de UPCN y de Apap han denunciado el accionar de sus propios paritarios y les piden la renuncia, repudiando el acuerdo firmado a espaldas de los trabajadores. Sin embargo, ATE reconoce el acta como “legal” y no ha planteado hasta ahora desconocerla y reabrir la discusión salarial.


 


Por su parte, Adosac ya realizó cuatro paros de 48 horas y tiene una negociación abierta, pero subsiste la intención de Peralta de dictar el aumento por decreto.


 


A su turno, los municipales de Río Gallegos, que debían recibir un incremento del 15% en marzo, por una negociación del año pasado se encontraron que no sólo no les reconocen aquel acuerdo, sino que la única oferta es la del gobierno provincial. Inmediatamente, decretaron un paro de 48 horas para el 31 y el 1°. Otro tanto han planteado los municipales de Puerto Deseado. Los municipales de Caleta convocaron a una asamblea general el mismo 31.


 


Hace 15 días realizamos el congreso de la CTA en Caleta Olivia, con una destacadísima participación de la Coordinadora Sindical Clasista, congreso que se planteó la necesidad de unir las luchas, como finalmente se concretó en la gran marcha del 26. Para mediados de abril está prevista otra convocatoria a congreso provincial de la CTA.


 


Desde la Lista Violeta (Estatales en Lucha) estamos impulsando que ATE convoque a asamblea general a las bases de todos los gremios y votar unidos el rechazo al acta de la paritaria que pretende cerrar la discusión. Están dadas las condiciones para dar un golpe decisivo a las dirigencias sindicales oficialistas y arrinconar al gobierno para que mejore sus ofertas. Los petitorios de todos los gremios parten de un mínimo de 14.000 pesos y las ofertas colocan a los estatales por debajo de 8.000 pesos y recién en agosto.


 


Peralta ha apoyado la rebaja del precio de corte del petróleo, sobre el que se calculan las regalías. Eso significa un subsidio directo de la provincia a las petroleras de 30 millones de pesos al mes. La provincia depende del auxilio nacional. Entre la demagogia de Peralta y las necesidades básicas de gran parte de la población, hay un abismo.


 


Por eso, el fantasma de 2007 sobrevuela la provincia, y la suerte en esta lucha dependerá en su mayor parte de la política de las direcciones sindicales no oficialistas. Impulsemos asambleas, congresos y todas las formas posibles de unidad de acción, para que el salario cubra la canasta familiar y el gobierno devuelva la Caja de Servicios Sociales a los trabajadores.