Los últimos recibos de sueldo en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial dan cuenta de una importante rebaja salarial contra decenas de técnicos y profesionales de larga trayectoria, a quienes se les eliminaron cargos adicionales (entre otros casos, por jefaturas de sector).

En muchos casos, incluso, se quita la remuneración pero los profesionales deben continuar realizando la labor correspondiente al cargo eliminado.

Este ataque es un nuevo paso del plan de vaciamiento del INTI llevado adelante por la gestión de Javier Ibañez y el gobierno nacional. La implementación de la “nueva estructura” del organismo comenzó con el despido de 266 trabajadores y trabajadoras en enero de 2018, para luego avanzar en el desguace de los Centros de investigación del INTI, la transferencia de ensayos y certificaciones a empresas privadas, y el nombramiento de más de un centenar de “asesores” contratados a través de la Fundación Saber Cómo con sueldos a discreción.

Cambiemos, en la ilegalidad

La carrera laboral de los profesionales, técnicos y auxiliares del Instituto, consagrada en el Convenio Colectivo de Trabajo Sectorial (CCTS), ha sido congelada unilateralmente, y quedan pendientes la asignación de categorías desde 2014, para más de 750 trabajadores/as de la sede central de San Martín (Parque Tecnológico Miguelete) y más de 1.000 en todo el país.

Es el propio Estado el que incumple los convenios colectivos, al igual que lo ha hecho en las últimas décadas imposibilitando el pase a planta permanente, según lo indica la ley 25.164 regulatoria del empleo nacional.

Las autoridades de INTI incumplen además fallos judiciales definitivos de reinstalación de dos delegados, impidiéndoles el ingreso. Toda esta orientación en contra  de los trabajadores/as es sostenida por medio de persecución, hostigamiento y la militarización del Instituto.

Concentremos la fuerza de los estatales

Desde la Junta Interna de ATE-INTI denunciamos que la rebaja que llevan adelante por la quita de cargos representa un nuevo ataque a los salarios, que ya han perdido un 30% con respecto a la inflación en 2018, y perderán otro 25% este año por la ruinosa paritaria a la baja firmada por UPCN y el Gobierno. A esto se suma la confiscación resultante de la aplicación del impuesto a las ganancias a los sueldos.

Este nuevo ataque en INTI se encuadra dentro del violento ajuste que sufre el sector de Ciencia y Técnica: más de 2.000 despidos en Conicet, presupuestos a la baja en las universidades y ajuste en la Comisión Nacional de Energía Atómica.

Las autoridades del INTI deben retrotraer esta rebaja salarial sobre los afectados y garantizar el salario que venían percibiendo. Que el INTI se haga cargo del pago del impuesto a las ganancias. Abajo el impuesto al salario.

Denunciamos la completa complicidad y quietud de las direcciones tanto de ATE como de UPCN y su colaboración para dejar pasar el ajuste. Para que los estatales conquistemos nuestras reivindicaciones y derrotemos estos ataques patronales, proponemos la realización de un congreso de estatales con mandatos de asambleas de base, como punto de partida de un plan de lucha escalonado para derrotar a Macri, el FMI y a los gobernadores.