A partir de la decisión política de iniciar una masiva, pública, desprejuiciada y permanente campaña de suscripción de los compañeros de trabajo y de sus relaciones personales, al mes de julio del 97 hemos abordado a unos 140 compañeros. Pero en realidad, ese número debe duplicarse, en virtud de las primeras suscripciones, las resuscripciones, los rechazos, las nuevas suscripciones de los últimos meses y las situaciones aún no concretadas.

 

El porcentaje de rechazos a las suscripciones fue del orden del 10% durante todo el período inicial (de abril a setiembre del 96), pero en mayo del 97 bajó al 6%. Incluso compañeros que no militan en el Partido Obrero han suscripto a relaciones personales o familiares que no son trabajadores del INTI, pero por ahora el grueso de las aproximadamente 100 suscripciones vigentes son trabajadores del Instituto.

 

En las sucesivas elecciones gremiales, que cada 2 años convoca la UPCN, la burocracia de Andrés Rodríguez y las sucesivas autoridades han impulsado campañas derechistas contra la lista Naranja de UPCN, que impulsa el PO junto a activistas independientes. De la Naranja ha salido por tres períodos consecutivos la comisión gremial interna. La campaña iniciada el año pasado, tendiente a concretar una amplia difusión de Prensa Obrera entre los compañeros de trabajo, no importa cuál sea su posición política o gremial, terminó de hundir toda posibilidad de que dicha política maccartista pueda desarrollarse en el Instituto. Es ella una de las razones que explica que, a pesar de las maniobras de la burocracia sindical para impedir el último triunfo de la Naranja en julio del 97, el porcentaje de votos que ésta concitó fue del orden del 80%.

 

Pocas veces nos ha quedado tan claro el valor que tiene la acción política en relación a la acción reivindicativa de los trabajadores.

 

La sostenida adhesión al periódico evidencia que estamos en presencia de un proceso de solidaridad política de los trabajadores hacia una organización que, justamente, se preocupa por organizar con un programa político a los trabajadores, para superar las trabas y la desmoralización que impulsan la burocracia sindical y las demás instituciones del Estado, para luchar y alcanzar nuestras reivindicaciones, derechos y aspiraciones comunes.

 

A este objetivo de llevar una prensa de trabajadores a todos los compañeros, ahora le vamos a incorporar un nuevo sector, del que aspiramos que encuentre y utilicePrensa Obrera como un vehículo para expresarse por sus aspiraciones y para formarse políticamente junto a nosotros.