Sindicales

22/4/2015|1360

Judiciales: histórico parazo del fuero penal: Quebramos la paz social de Piumato con Lorenzetti

delegado general de edificio


Cuando este artículo esté en la calle, los judiciales del fuero penal -empleados de las fiscalías, tribunales orales, defensorías y la Casación- se encontrarán realizando un segundo paro general organizado por un cuerpo de delegados votado y mandatado por unas 80 oficinas.


Implementación, pactos y ajuste


La Reforma del Código Procesal Penal tenía por objeto la intervención del gobierno en la Justicia Federal por intermedio de la Procuración General. Sin embargo, los jueces federales, que venían acorralando al gobierno con causas de corrupción, llegaron a una tregua con el kirchnerismo y no se aplicará.


Lorenzetti, que jugó en estas negociaciones (aprietes) con Comodoro Py, ahora mantiene un silencio de ultratumba respecto a Penal ordinario y no recibe a los camaristas que le piden audiencia por el tema ni tampoco a los judiciales. ¿Será que se lava las manos porque el gobierno desistió de aumentar la Corte con conjueces de “Justicia Legítima”?


Otro de los objetivos, viabilizado por la ley de implementación, era imponer una reforma antilaboral con despidos de cientos de interinos y contratados, la destrucción de la carrera judicial y el ingreso de 1.600 cargos a dedo en el ámbito de la Procuración.


Los judiciales, los delegados y el paro


Urgidos por la situación, los 1.500 trabajadores de penal comenzaron a estudiar los proyectos, a deliberar en las secretarías y comunicarse con otras oficinas exigiendo al gremio y a las agrupaciones una acción inmediata.


Mientras, los jueces y los funcionarios, cada sector por su lado, se encontraban negociando mejoras salariales y una atenuación de los efectos de la reforma respecto a ellos.


Las propuestas de elegir delegados por oficina y de realizar un paro con movilización a la Corte exigiendo el pase a planta, convenios de transferencia de personal -con criterios objetivos de nombramiento y respetando la carrera judicial- y un reescalafonamiento salarial, fueron ampliamente apoyadas en las asambleas y en las oficinas. Esta organización fue determinante para que todos los trabajadores de penal paren en un bloque masivo arrastrando a otros sectores afectados por la reforma.


Las perspectivas, el plan de lucha y el gremio


Luego de chocar con la convocatoria al paro, Piumato intenta reposicionarse decretando un nuevo paro y movilización sumando a todo el sector penal. Sin embargo, mantienen una oposición al pase a planta porque ese reclamo implicaría chocar con Lorenzetti.


El paro de penal conmovió a mucho más que un fuero. Los tribunales orales se encuentran en un estado de ebullición, sobrepasando a su comisión interna, con votaciones de paro y elección de delegados. Esta semana se debe poner a debate una intervención legislativa de los judiciales y la continuidad del plan de lucha.


Así como Ganancias fue la reivindicación que quebró momentáneamente la tregua entre el moyanismo y el gobierno y detrás entraron en escena todos los trabajadores y todos los reclamos, la lucha del fuero penal se perfila como la punta de lanza para una intervención general de todo el gremio judicial por una larga lista de reclamos sin respuesta.