Nuestra huelga, que lleva semanas de paro y movilización, piquetes y hasta represión policial, es el conflicto más importante que tiene Scioli. No pudieron derrotarlo en forma directa y apelaron a un acta tramposa para enredarnos. Desde luego, con el concurso de los dirigentes de la AJB.

La porcentual, el reclamo central de la huelga para atar el salario judicial al de los jueces, según el acta se gira a una comisión mixta que definirá en sesenta días una propuesta. O sea, nada concreto, porque los integrantes de la comisión podrían no llegar a ningún acuerdo. No hay plazos de ejecución y no se exige claramente el reintegro total de los descuentos por los días de paro. Se acepta el aumento a la baja que nos dieron por decreto (21 y 26% para la categoría más baja) y se lo reconoce "a cuenta de la porcentual", pero en concreto todo queda igual.

Tampoco hubo tiempo para el análisis en cada oficina de todos estos vericuetos. El acta que la AJB presenta como aprobada ‘por amplia mayoría' fue considerada en asambleas pequeñas y de departamentales del interior, en tanto las asambleas más numerosas la rechazaron.

Además, en varias asambleas se le hicieron enmiendas que le cambiarían fuertemente el carácter. Para dar un ejemplo: en Mar del Plata, la asamblea votó la aprobación con enmiendas que planteaban plazos de recuperación de la porcentual, lo cual tiraba abajo el proyecto.

Los dirigentes de la AJB, Blasco (michelista) y Pérez Guillén (pro Yasky), se arrogaron un mandato que no tienen. Por otro lado, las departamentales dirigidas por los compañeros de la lista Celeste (una agrupación opositora de corrientes kirchneristas) plantearon un proyecto superador al de la burocracia, aunque no surgió de allí un camino práctico para seguir la lucha.

Proponemos asamblea general

El gobierno extendería la conciliación obligatoria por diez días más y amenaza con sanciones a la AJB y cesantías a los trabajadores. Quiere cerrar por la fuerza el conflicto sin ofrecer nada de lo que reclamamos. No hay que acatar la conciliación obligatoria, como no acatamos la anterior.

La enorme crisis fiscal del gobierno provincial, agravada por las diputas internas del kirchnerismo, podría llevar al gobierno a rechazar cualquier propuesta que sólo mencione la porcentual, como ocurre con el acta tramposa de la dirección de AJB.

La posición de Judiciales en Lucha es impulsar en las asambleas la moción de realizar un congreso abierto con mandato de la base de las 18 departamentales, para votar el rechazo al acta propuesta de la AJB, la elaboración de un proyecto que represente nuestra lucha y paritarios de base que acompañen a la directiva, con el mandato de organizar la huelga general con paros de 72 y 96 horas hasta la huelga indefinida, reforzando la organización de la medida mediante delegados de base que se reúnan para seguir el curso del conflicto. Que la CTA organice un plan de lucha para llevar la huelga a la victoria.