En un nuevo intento de frenar las luchas en curso, la burocracia de la UEPC se lanzó a un “ayuno voluntario”, en el que participaron el secretario general de la Junta Ejecutiva, junto a tres secretarios departamentales de Capital e Interior. Pero el hecho novedoso radica en que fueron acompañados en su “ayuno” por un cura que se reclama perteneciente a la “teología de la liberación”, quien aparte les proporcionó “apoyo espiritual”.

Sin embargo, no es la primera vez que los místicos gremialistas realizan actividades de “orden espiritual y religioso”. Involucrando a la UEPC, ya con motivo de la celebración de San Cayetano, concurrieron (junto a este mismo cura) a la procesión para “rezar por trabajo”; ahora rezan por mejora salarial y por que el gobierno “reflexione” (lo que en verdad constituiría un “milagro”).

Pero esta maniobra es un nuevo intento de recuperar la imagen perdida en las innumerables dilaciones de ir a una lucha a fondo, con levantamientos de paros o con medidas como “media hora de asamblea sin atención de alumnos”, hechos todos que vienen produciendo bronca y repudio de las bases, quienes se desafilian en masa o, por ejemplo, repudiaron la fiesta del Día del Maestro, a la que concurrieron poquísimos docentes. Se suma a todo esto la fractura del MOAS, con la ausencia del SMATA y la UOM en el paro del 2 de agosto, lo que echa por tierra los deseos de liderar al gremialismo cordobés que anida Grahovac.

Pero ni la “teología de la liberación” ni el “ayuno voluntario” le alcanzan a la burocracia uepeceísta para disimular el colaboracionismo con el gobierno radical: “ ‘Este ayuno es una forma austera, humilde y de entrega de quienes no avalamos ni somos cómplices de la desconsideración del gobierno para con los que trabajamos en educación’, resaltó Grahovac” (La Voz, 13/9/94), lo que lo convierte en un “humilde y austero” siervo del gobierno y sus intereses. Así también se expresó el curita tercermundista, al plantear a la prensa: “con esto queremos llamar a la reflexión a los gobernantes sin perjudicar a los docentes”.¡Qué conmovedor! Lo que en realidad expresa es su voluntad de no perjudicar a un gobierno corroído por la descomposición y el agotamiento.

Y como si fuéramos pocos parió mi abuela, apareció por estos días en escena la futura diputada frentegrandista Mary Sánchez, a dar su anuncio de retiro de CTERA: “Es mi última presencia como representante gremial en Córdoba… (para dedicarse) de lleno a la construcción política (La Voz, 15/9/94), porque “(no quiere) involucrar a todos los docentes en su militancia en el Frente Grande”(ídem). Sin duda que semejante anuncio tenía un excelente marco en medio de tanta “austeridad y entrega”, aparte de reiniciar oficialmente las relaciones diplomáticas interrumpidas tras la derrota de la marysanchista cordobesa Soledad García (y después de dar su apoyo a la “medida” de ayuno) y de las conversaciones de la clique Grahovac con Bordón y Chacho Alvarez.

La voluntad de luchar de los docentes cordobeses está sin embargo intacta, ya que el acatamiento al paro de 24 horas del último 16 de setiembre se cumplió masivamente, aunque gremio y gobierno (de acuerdo una vez más) se negaron a dar los índices. Está planteado seguir con medidas de fuerza, aunque la burocracia continúe empeñada en frenar.