Sindicales

8/5/2003|799

La entrega del Centro Gallego

La Lista Bordó (integrada por el Mst y el Pc) venía dirigiendo la Comisión Interna del Centro Gallego. Pero su accionar ha sido un desastre; a espaldas de los trabajadores, avaló acuerdos con la patronal que violan normas y conquistas del Convenio Colectivo de Trabajo. Permitió que se avanzara en el cierre de camas y sectores del hospital, y avaló la enfermería domiciliaria – o sea, el vaciamiento de secciones enteras y que los trabajadores sobrantes debieran trasladarse fuera de la institución, “a domicilio”, una nueva “categoría” que no existe en el convenio de los trabajadores de la sanidad (Atsa), totalmente flexibilizado – . Un grave precedente para todo el gremio de la sanidad, contra el cual debemos pronunciarnos y que fue denunciado en Prensa Obrera (Nº 794).


Pero las enfermeras y mucamas pusieron en pie un movimiento de resistencia a este plan antiobrero de la patronal. Al frente de ese movimiento se colocaron los delegados, congresales y activistas de la Lista Violeta – con el apoyo de Asis y el Polo Obrero – .


En este marco se convocaron las elecciones de Comisión Interna, en una convocatoria amañada por la burocracia del sindicato y la patronal. Triunfó una lista que se reclamó “independiente”, la Azul, pero que está integrada por elementos que estuvieron en anteriores listas de la burocracia (Celeste). Estos usaron la traición de la Bordó, para hacer “macartismo” contra la Violeta que llevó adelante el proceso de resistencia a los “ajustes” antiobreros de la patronal. Lograron confundir a una parte de los trabajadores, y con el apoyo patronal – entre los administrativos también votaron jefes y supervisores – lograron sacar 252 votos contra 83 de la Bordó de IU, la lista entregadora. La Violeta salió segunda, con 115 votos. En las secciones, la Azul sacó 3 delegados, la Violeta 2 y la Bordó 1.


Ahora se trata de frenar el plan patronal de vaciamiento y flexibilización laboral. En su propaganda preelectoral, la Azul decía: “Nos interesa el cumplimiento del convenio colectivo de trabajo, preservar la fuente de trabajo, cumplir los mandatos y respetar a los compañeros”. Pues bien: manos a la obra. Que se convoque a una Asamblea General para votar que no vamos a dejar avasallar el convenio y que defenderemos los puestos de trabajo de todos los compañeros y la fuente de trabajo (no al cierre de salas y camas).