Sindicales

13/9/2012|1239

La inflación es récord, no los salarios petroleros

EXCLUSIVO DE INTERNET


El reciente acuerdo salarial firmado por el sindicato petrolero de Neuquén, Río Negro y La Pampa se ha presentado como un pauta salarial récord, del orden del 35 al 40%, que la colocaría muy por encima de los topes de Tomada y Kristina.


Este punto de vista es una falacia para la tribuna.


El aumento nominal es, para el año 2012, de apenas el 25% y 13% el otro año.


¡Treinta y ocho por ciento para dos años, no es ningún aumento récord!


Pero tampoco se trata de un aumento de un 38% en el bolsillo, sino que es sobre el básico (de 3.500 a 6.000 pesos, según las categorías), que es una tercera o cuarta parte del salario de bolsillo, ya que el salario bruto está constituído en su mayor parte por adicionales no remunerativos con valores vigentes hasta el 31 de diciembre de 2012.


Conclusión: se ha firmado una baja salarial. Esto es estrictamente lo que las petroleras le exigieron a Sapag cuando visitó Estados Unidos hace poco. Le reclamaron por el alto costo laboral en Neuquén.


El descontento en la base petrolera es grande. Por un lado los adicionales, que son la parte del león del salario, siguen congelados hasta fin de año, pero además porque se pierden por huelga o por tres faltas por accidentes o enfermedad.


La asociación con el capital extranjero que implica la "nacionalización" de YPF, ya no sólo se manifiesta como una reprivatización, sino que la misma exige la devaluación salarial de los obreros petroleros.