Sindicales

1/9/2005|915

La lucha de Atento en una nueva etapa

Comienza una nueva etapa de la lucha del gremio telefónico. Un plenario de delegados reunido el jueves 25/8 largó un paro y una movilización para el jueves 1 de septiembre. Uno de los capítulos más importantes del paro es la lucha de los trabajadores de Atento Buenos Aires.


Atento es la principal tercerizada de Telefónica en Argentina, que contrata los servicios de aquella por el bajo costo de la mano de obra. Más de 3.000 operadores desempeñan tareas de atención encuadrados bajo el convenio de comercio, incluso con salarios por debajo de este convenio, ya que están sujetos a variables por productividad y “desempeño”, cobrando solamente una proporción del básico por una jornada de 6 horas.


La lucha por el encuadramiento de Atento se incorpora a una lucha histórica encabezada por los sectores de tráfico de Telefónica y de Telecom. Con la privatización de Entel los operadores de tráfico pasaron a trabajar de 6:30 a 7:30 horas como jornada completa. A esto se agregó la reducción de los descansos visuales y las pausas entre llamadas. Miles de pasantes y contratados fueron incorporados para reemplazar a los “viejos” operadores/as de Entel. Pero los trabajadores con mucho esfuerzo se organizaron para superar las diferencias impuestas por la patronal y eliminar las pasantías como trabajo en negro y fuera de convenio. Efectivamente, los pasantes pasaron al convenio y los contratados fueron efectivizados a fuerza de importantes luchas. Acto seguido las empresas diseñaron una política para garantizar la continuidad del fraude laboral y el desconocimiento del convenio por otros medios. Creció entonces, una vez más, la tercerización y “autotercerización” de la actividad telefónica. Se le dio aire a una empresa como Atento, que forma parte del Grupo Telefónica pero que funciona como una empresa aparte. Esto fue denunciado en reiteradas oportunidades por el sindicato. Pero el ministerio de Trabajo, al igual que con las pasantías, fue cómplice del abuso de estas patronales.


Ahora, a más de un año de la toma de Atento, los trabajadores de esta empresa se han organizado y han salido a luchar junto a Foetra. La respuesta de Atento tampoco se hizo esperar: inició una causa penal contra directivos y delegados de Foetra y militarizó los edificios de la empresa con gendarmería, policía, seguridad “privada” y “protección” reclutada, en muchos casos, entre la mano de obra desocupada de la dictadura. También se enrejaron las puertas y portones de entrada con la excusa de impedir una “invasión” de los bárbaros de Foetra. Esto fue denunciado por el peligro que implica en caso de una evacuación.


Pero los trabajadores de Atento no precisaron de la presencia de Foetra en los lugares de trabajo para paralizar las tareas. En varias oportunidades y en forma coordinada se vienen realizando asambleas y paros en las plantas de Martínez y Barracas. La última y más importante fue el miércoles 24/8 donde se sumó Martínez, superando una vez más las amenazas y aprietes de la patronal. Ese mismo día se produjo un remerazo exigiendo el encuadramiento de los trabajadores de Atento. En una nueva muestra de la brutalidad y dictadura patronal, los compañeros y activistas de Martínez fueron revisados para ingresar a los lugares de trabajo. El cacheo fue resistido por las compañeras y denunciado al sindicato como una nueva provocación de la empresa para evitar la concurrencia masiva al paro y movilización previsto para el jueves. Los trabajadores de Atento se encuentran en una lucha cotidiana y permanente contra la política patronal que viene fracasando estrepitosamente.