El viernes pasado en un memo distribuido en todas las oficinas la patronal hizo pública su intención de cesantear 550 compañeros, incluyendo esto el cierre de 15 sucursales. Esto es aproximadamente el 50% del personal. Aparte de eso la empresa (Banco Mercantil y la aseguradora norteamericana Leucadia) aducen que los despidos se ajustan al “procedimiento de crisis de empresas” cosa de ahorrarse el 50% de las indemnizaciones. La gremial, dirigida por un miembro del Directorio, Andrés Castillo, solicitó la declaración de la conciliación obligatoria que fue concedida por diez días por el Ministerio de Trabajo. En el último plenario de delegados generales de la Bancaria ni siquiera pusieron el tema en discusión.

No es de descartar que ese lapso de tiempo sea “aprovechado” por estos sindicalistas empresarios para negociar el número de despedidos y el monto de los “retiros voluntarios”, para mostrar esto como un “triunfo” de un sindicalismo responsable y prudente… de la mano del cual la Caja se privatizó y ya perdieron su trabajo unos 2.000 compañeros.

Los compañeros de la Naranja planteamos la necesidad de la convocatoria de la Asamblea General de la Caja que vote la ocupación de la misma ante cualquier intento de la patronal de pasar a concrtar los despidos.