Sindicales

29/4/2010|1126

La situación en Buenos Aires

La burocracia de la Federación reclama un aumento del 30% y, aunque no en forma oficial, un salario mínimo para quien ingresa de 3.200 pesos.

En el medio, se suceden paros de cuatro y ocho horas en las cuatro plantas cordobesas del grupo Arcor.

La burocracia de Daer dispuso un “trabajo a reglamento” que no se aplica en planta alguna. En Kraft, por ejemplo, se trabajan horas extras a destajo.

En la propia Kraft, los paros anteriores de una y dos horas se cumplieron formalmente, garantizadas en los turnos mañana y tarde por los congresales de Daer. Varios activistas invocaron la oportunidad perdida para una asamblea general de planta.

Días después, en la movilización al Ministerio de Trabajo del 14 de abril, la burocracia organizó la presencia de 2.000 trabajadores y el arco de internas y agrupaciones combativas llevó no más de 200, cuando está al rojo el reclamo de un 35% de aumento.

Concretamente, el planteo de convocar a una asamblea general que elija paritarios, vote un mandato y debata un plan de lucha en Kraft, Pepsico y Stani ha sido dejado de lado. El activismo en Kraft considera viable la asamblea general, pero espera la iniciativa de la interna.

En Stani hubo elección de comisión interna y una lista antiburocrática perdió por estrecho margen, que incluía la radicalización de la base obrera. A seguir el camino cordobés.