Sindicales

9/5/2020

La situación en los casinos de la Provincia de Buenos Aires

Cesación de pago para los trabajadores y salvataje a los pulpos del juego.

Bronca e indignación causó la falta de pago de las retribuciones de las y los trabajadores de los casinos estatales de la provincia de Buenos Aires. Llegada la fecha usual de cobro los ingresos se vieron brutalmente mutilados en un 80%, según palabras de Daniel Méndez, presidente de la Aecn (Asociación de Empleados de Casinos Nacionales) (El Marplatense, 8/5). Sucede que los mismos se componen a partir del salario habitual que paga la provincia, lo recaudado por caja de empleados, horas extras y un porcentaje de las ganancias que arrojan los miles de slots que están en los casinos de la provincia, fruto de la privatización encubierta y propiedad de diferentes empresarios del juego. Como si fuera poco esta situación contribuye al vaciamiento del IPS que recientemente ha convalidado el gobernador Axel Kicillof ya que se traduce en una merma directa de los aportes previsionales, fortalecida encima con el congelamiento salarial. De esta forma los ingresos de los trabajadores de juego, administración, maestranza y servicios, retroceden significativamente además atados a la desvalorización de los pesos por la emisión descontrolada de billetes a nivel nacional y la imparable inflación, ubicando a los mismos muy por detrás de la canasta familiar básica.


Los casinos y bingos bajaron sus persianas el 14 de marzo de la mano del aislamiento social preventivo y obligatorio. El vaciamiento, la privatización y el abandono de los casinos estatales fueron y son la constante de los gobiernos de turno bonaerenses que usan los recursos como caja política personal y faenan la jugosa presa que se disputan los pulpos del juego para el lavado de dinero proveniente del narcotráfico, las redes de trata, la venta de armas, etc. El retrato de salas cerradas, deterioradas y poco rentables, el ataque a los trabajadores y su retroceso en derechos también se han constituido en regla. Sin convenio colectivo, con condiciones laborales altamente flexibilizadas, contratos basura, inestabilidad laboral, insalubridad y retroceso de ingresos no atados a los índices inflacionarios, la pandemia potenció los golpes que se desataban invariablemente sobre los casineros en épocas de “normalidad” capitalista.


Los gremios hermanados y mayoritarios del flamante concejal marplatense del Frente de Todos, Roberto “Chucho” Páez, de la Asociación gremial de Empleados de Administración, Maestranza y Servicios de los Casinos Nacionales (AMS) y del mencionado Daniel Méndez (Aecn), se han limitado a reclamar administrativa y tardíamente una asignación compensatoria, que camina lentamente por los despachos platenses, sin promover ningún tipo de deliberación entre las y los trabajadores. Compensación que estiman pueda llegar a otorgarse, pero nadie sabe cuándo, ni en qué términos y que presuntamente podría originarse a partir del recorte de hecho de horas extras, la suspensión de desarraigos y lo que la administración de Kicillof se ha ahorrado por frizar la discusión salarial. Estas conducciones, hoy integradas al gobierno por el cual hicieron campaña, dejaron pasar el incumplimiento paritario del gobierno de Vidal, que significó el no pase a planta permanente de más de 300 compañeros y compañeras con más de diez años de antigüedad, el cierre definitivo del Casino de Valeria del Mar y el futuro incierto del de Pinamar. Son los que agitaron el lockout patronal de los bingueros porque les gravaban un impuestito y quienes mantienen un diálogo más fluido con los patrones del juego que con sus representados.


Gobierno que no paga, sindicatos que no mueven y… empresarios rescatados.


La pata más ancha de la tríada es la de los pulpos del juego. Beneficiarios de la privatización encubierta, dueños de bingos, slots y casinos. Son los patrones indirectos de los trabajadores estatales de casinos y los explotadores formales de los trabajadores que desempeñan sus tareas atendiendo los slots y otras actividades derivadas. Responsables históricos del derrumbe de las salas de juego estatales y su vaciamiento surgen mesiánicamente como los únicos que puedan solventar la actividad, los favorecidos de las políticas estatales del menemato y todos los gobiernos ulteriores. Son las execrables patronales que vienen amasando jugosas ganancias desde hace más de 30 años con la proliferación del juego, actividad destructiva, incentivada por todos los partidos políticos asociados a ellas. Los que devoran los ingresos de los trabajadores que tienen la ilusión de “ganarle” al casino o a las “maquinitas”.


El ejemplo más claro de lo que acá sostenemos es el de la firma Casinos Trilenium/Boldt, fuertemente asociada al expresidente Eduardo Duhalde, que ha suspendido a sus trabajadores pero que acaba de acceder recientemente al programa de Asistencia al Trabajo y la Producción por el cual estado nacional, a través de la Anses y con la plata de las y los jubilados, se hace cargo del 50% del salario de los trabajadores que atienden las máquinas tragamonedas. Toda una estafa al pueblo trabajador y los jubilados. Los que nunca dejaron de ganar y siempre negrearon a sus trabajadores son rescatados por el gobierno y los que en realidad necesitamos ser rescatados somos ajustados. Mientras tanto el gobernador de la provincia está concentrado en el pago de la deuda externa sin importar lo que cueste. En febrero pago U$D 275 millones, ahora tiene un nuevo vencimiento por U$D 110 millones. Los compañeros deberán sacar conclusiones.


– AMS y la Aecn deben convocar a la deliberación en asambleas virtuales y a un plenario de delegados con mandato para resolver acciones.


– Básico de 40 mil pesos para las categorías iniciales e indexación mensual atada a la inflación.


– Apertura de los libros contables de los Casinos y empresas concesionarias de “tragamonedas” y servicios, bajo control de los trabajadores


– Que el gobierno garantice el cobro integral de los ingresos mientras las salas de juego permanezcan cerradas con actualización de acuerdo a inflación.


– Impuesto a los pulpos del juego y las grandes riquezas


– No al pago de la deuda externa del FMI y los bonistas  


– Que la crisis la paguen los capitalistas