La situación en los hospitales municipales

El 26 de julio asistimos a una convocatoria de la Asociación de Médicos Municipales en la que se trató la cuestión de la violencia en el ámbito de las guardias hospitalarias. Se discutió, también, la situación extrema del Penna, que en realidad no es exclusiva de ese hospital, ya que en el Vélez, en el Tornú y en el Alvarez las condiciones de trabajo y las penurias que sufren los profesionales y trabajadores de la salud y los pacientes son las mismas.


La grave situación que atraviesa la Guardia del Hospital Penna es la expresión del colapso del sistema de salud, incapaz de dar satisfacción a las necesidades y a la demanda de la población.


En la reunión, los representantes gremiales del Hospital Alvarez, que integran una filial de la AMM opositora a la burocracia de la conducción central, denunciaron la grave situación laboral y salarial, la flexibilización de las condiciones laborales y el deterioro edilicio (expresión, en definitiva, del deterioro de los hospitales y de la salud pública de la Ciudad), como un hecho de violencia ejercida desde el Gobierno de la Ciudad hacia los trabajadores de salud y la población usuaria del hospital.


Por mi parte, denuncié la disciplina impuesta a los trabajadores por la patronal del gobierno, al efectivizar el régimen de las ART que impone una conducta insuficientemente reparadora del daño ocasionado por el trabajo, en detrimento de la integridad física y psíquica del empleado, despreciando la acción preventiva frente al accidente laboral.


Desde el Alvarez se reclamó a la conducción de la AMM un plan de acción gremial exigiendo al Gobierno de la Ciudad, una urgente solución de conjunto (nombramientos, designaciones, inversión en el mantenimiento edilicio) de los problemas que hemos denunciado.


La conducción de la AMM impuso nuevamente un límite al reclamo gremial, reduciendo la iniciativa a la elaboración de un documento y a la formación de una comisión de trabajo.


Entendemos que es absolutamente insuficiente y que debemos organizar el reclamo inmediato de todos los trabajadores y profesionales de salud, reuniendo las asambleas en los hospitales y centros de salud, votando un programa de acciones concretas, que incluyan la cuestión salarial, la estabilidad laboral y las condiciones laborales tanto en el sector de Urgencias como en todo el ámbito de trabajo.