El presidente de Trenes Argentinos, Martín Marinucci, y el secretario general de la Unión Ferroviaria (UF), Sergio Sasia, acaban de firmar un acuerdo que permite la extensión de la jornada laboral para los guardatrenes del servicio eléctrico hasta el próximo 31 de mayo, “salvo razones de fuerza mayor”.

El acuerdo extiende a 7.12 horas la actual jornada de 6 horas, manteniendo las 36 semanales por la vía de trabajar 5 jornadas, con descanso y franco consecutivos. Plantea que solo regirá con determinados diagramas de emergencia, siendo que todos los que se han improvisado hasta el presente fueron con una menor frecuencia de trenes de lo habitual.

La finalidad declarada del acuerdo es cubrir al personal licenciado por integrar grupos de riesgo. Pero ello se hace a costa de empeorar la exposición al virus en el servicio, ya que recargará los diagramas de quienes están trabajando y pondrá menos trenes a disposición del usuario. Correspondería, por el contrario, cubrir las vacantes de inmediato, previa instrucción, con trabajadores de categoría inferior, y sostener la diagramación normal para garantizar el distanciamiento mínimo dentro de los coches

De paso, en el texto del acuerdo, Sasia le concede una vieja ambición a la gerencia, que es la eliminación de los diagramas de órdenes.

Por todos estos motivos, el acuerdo Marinucci-Sasia no se legitima en la lucha contra la pandemia, sino que es un avance contra la conquista de la jornada de 6 horas y una avanzada de flexibilidad laboral.

Se ofrece al trabajador la zanahoria del pago de la 1.12 hora extra diaria, ello mientras está suspendida negociación paritaria que debería actualizar el salario frente a la estampida de precios de la canasta familiar.

Voceros de la UF dicen que la aplicación del acuerdo sólo está previsto para el ferrocarril Sarmiento, donde habría una menor disponibilidad de guardatrenes en servicio. Sin embargo, como el guarda se jubila con el régimen general de 65 años, una parte importante de la especialidad de todos los ferrocarriles está incluida en los factores de riesgo y ha sido licenciada, por lo cual se trata de un acuerdo de probable aplicación en todos los ramales eléctricos de Sofse (Trenes Argentinos Operaciones).

Cuando los guardatrenes del ferrocarril Roca comenzaron el reclamo de jubilación anticipada por insalubridad, la Unión Ferroviaria les dio la espalda, pero Sasia no perdió un segundo en firmar sin consultar a los trabajadores si se lo pide el directorio de Trenes Argentinos. En el único ferrocarril donde se hizo una asamblea de la especialidad para fijar posición sobre el anuncio de este acuerdo fue, precisamente, en el Sarmiento, y los trabajadores votaron en contra.

En el ferrocarril Roca, los guardatrenes y el personal de control sobre formaciones están impulsando un proyecto de protocolo y un petitorio, que incluyen los reclamos de publicación y cobertura de todos los puestos descubiertos, defender el servicio normal de trenes, la menor exposición del personal y la provisión de todos los elementos de prevención, entre otros puntos.

Llamamos a rechazar el acuerdo Marinucci-Sasia en todos los ferrocarriles, con asambleas de dotación o especialidad, y votar a favor del proyecto de protocolo y petitorio impulsados por los trabajadores de la línea Roca.

¡Basta de acuerdos a espaldas de los trabajadores!

¡Respeto de la jornada y de todos los derechos adquiridos!

La verdadera lucha contra la pandemia es la que llevamos adelante los trabajadores.