Después de más de un mes de ‘silencio’, volvió a reunirse el Congreso de Delegados de Avellaneda. Durante ese lapso, no se logró avanzar un paso en los reclamos de los trabajadores de Aurora, que continúan sin cobrar y sin saber qué sucederá con sus puestos de trabajo. En esas graves condiciones, la UOM Avellaneda impuso una resolución en el Congreso donde ni siquiera se menciona a Aurora. El plenario, en cambio, se limitó a elegir representantes para el Congreso metalúrgico nacional del 7 y 8. Tampoco se mandató a estos representantes en el sentido de un plan de lucha, o siquiera de una acción nacional por los 1.700 metalúrgicos de las diversas plantas de Aurora.

¿Solución?

Interrogados por algunos de los delegados presentes, integrantes de la Directiva se limitaron a señalar que “se está discutiendo una solución” para Aurora. En la fábrica han circulado rumores sobre el contenido de la ‘solución’: la fábrica realizaría un pago “a cuenta”, que no excedería el 30 % de lo adeudado. Al mismo tiempo, “serían inevitables algunos despidos”. Supervisores de planta han comentado que este ‘paquete’ podría estar acompañado también de una suspensión prolongada.

Durante mucho tiempo, la UOM reclamó un “crédito” a Duhalde para que la patronal pusiera la planta en funcionamiento. El ‘crédito’, sin embargo, lo están ‘otorgando’ los trabajadores, que deberían aceptar ‘un pago a cuenta’. Pero luego de este ‘pago’, ni siquiera pondrían la planta en funcionamiento. En cambio, vendría acompañado de una suspensión prolongada, en cuyo transcurso, y con los trabajadores “afuera”, se pondrían en marcha los despidos.

Qué pasa en la fábrica

La solución que se ‘cocina’ en Aurora ‘huele mal’. Por eso, la marcha de las negociaciones entre la UOM, la patronal y el Ministerio es un secreto vedado a los trabajadores de la planta. No se convoca a asamblea, ni se informa siquiera en reuniones de sección sobre la marcha de las negociaciones. Esta situación no pasa desapercibida para los compañeros de la planta: varias secciones se han pronunciado por la ocupación activa y por una asamblea general. Días atrás, y a partir de estos pronunciamientos, se promovió una autoconvocatoria en el comedor de la fábrica, a través de una recorrida por todas las secciones. El movimiento contó, inclusive, con la simpatía de varios delegados. La autoconvocatoria fue frustrada por una acción abiertamente matonil de la CI, que amenazó y atacó físicamente a varios compañeros. Esta escaramuza fue discutida luego en toda la fábrica, aumentando el reclamo por una Asamblea General.

Mientras esto sucedía en Avellaneda, el mismo reclamo de Aurora: ¡Ningún despido! ¡Pago integral de todas las deudas salariales!, lograba una gran victoria entre los choferes del Oeste. Frente a las soluciones truchas que se están urdiendo a espaldas de los metalúrgicos, hay que abrir camino, en la ex-Siam, a los métodos de TDO: asambleas diarias, ocupación activa de la planta, reclamo a la UOM seccional y nacional de un verdadero plan de lucha, ganar las calles y el apoyo del movimiento obrero zonal a la lucha de Aurora.