Sindicales

29/8/2014|1329

Las imposturas del PTS

Las imposturas del PTS frente a la huelga de la docencia tucumana (santiago garcia sanchez)

El PTS -que tuvo una actuación completamente marginal en la lucha más importante de los trabajadores tucumanos y de la docencia universitaria nacional-, en su balance, no tiene empacho en atacar la lucha y la descomunal victoria lograda, en especial, a la Agrupación Naranja impulsada por el PO, que fue la vanguardia indiscutible de la misma.

En LVO del 12 de junio habían señalado que “la exigencia de una partida presupuestaria de emergencia para Tucumán (que plantea casi de manera exclusiva La Naranja-PO) no es una salida, porque este conflicto es objetivamente nacional”. Balanceando la lucha afirman que “lo que es poco entendible fue la impostura de la Naranja-PO que cuando estaba planteada la nacionalización y romper el techo salarial del gobierno, se empeñaba en discutir que el problema eran los bajos salarios tucumanos y que la clave de todo era pedirle una partida extra a la rectora Bardón”.

La crítica del PTS es una verdadera impostura porque el planteo del adicional salarial estaba completamente atado al reclamo nacional, no contrapuesto, ya que consistía en un planteo transicional hasta la reapertura de las paritarias. En sintonía con esa crítica cargan contra nuestro agrupamiento nacional por no haber nacionalizado la huelga y no haber parado la UBA. Una perfidia propia de sectas ya que, en oposición a las distintas burocracias que por todos los medios procuraron aislar la huelga tucumana, la Naranja buscó, tanto desde la UNT como desde la AGD, extender nacionalmente el reclamo (plenarios de secretarios generales, de seccionales combativas en Córdoba, paro nacional de Conadu Histórica, acto en la Casa de Tucumán junto a la Fuba, etc.).

Una característica de las sectas es actuar al margen de realidad, repitiendo un esquema -el que mejor le parezca- para realizar una crítica con propósitos puramente faccionales. El reclamo “exclusivo” de la Naranja del adicional fue refrendado por todas las asambleas generales y fue la reivindicación principal en todo el último tramo de la huelga cuando la misma se desenvolvía en un cuadro de aislamiento. Por otra parte, si cabe hablar de un triunfo, es porque se conquistó ese adicional que rompió con el cepo que el gobierno y las autoridades pretendieron imponer a los salarios a partir de los acuerdos firmados en las paritarias con las burocracias de las federaciones docentes.

En sus ataques faccionales, el PTS afirma, sin dar ningún ejemplo, que “la enorme base docente y su destacada vanguardia resistieron duramente, superando en muchas oportunidades a todas las corrientes que están en la dirección del gremio, hasta que lograron el reconocimiento a su reclamo”. De esta manera, intenta devaluar el rol de la Agrupación Naranja que, tal como quedó reflejado en todas las asambleas generales, orientó y canalizó al gran activismo que emergió al calor del conflicto y, por eso, es la candidata a dirigir el gremio en las próximas elecciones de diciembre.


Daniel Blanco – Luciano Grupalli