Sindicales

28/4/2016|1408

Los bancarios rompieron el ajuste

El resultado obtenido en todo este proceso demuestra que el conjunto del gremio bancario se encuentra en un ascenso sostenido desde los doce paros contra el impuesto a las ganancias y los despedidos de Tucumán del año 2014, debemos profundizar ese camino por todos los reclamos pendientes


Un proceso huelguístico en ascenso y una movilización sin precedentes que tuvo más de 20 mil bancarios en la calle permitió quebrar la resistencia patronal y el techo que el gobierno nacional pretendía poner sobre la paritaria bancaria y la lucha contra los despidos.


 


La dirección del sindicato levantó el conflicto con la firma de un aumento del 33% en un solo pago, la reincorporación de 20 despedidos del BCRA que llevaban casi 70 días de acampe y cuatro despedidos del Banco Provincia. Además, se obtuvo un pago mínimo por el día del bancario de 17.000 pesos para el inicial.


 


Con este acuerdo, el conformado inicial bruto asciende a los 19.600 pesos, a los que debe sumarse una suma en negro de 886 pesos por la participación en la rentabilidad del sistema financiero que puede variar hacia abajo e incluso ser eliminada si los banqueros acusan una caída en la actividad.


 


No queda duda que el movimiento de lucha que tomó forma en un plan escalonado daba para avanzar en torno de otros puntos extremadamente sensibles. El alcance que tendrá el impuesto a las ganancias luego del aumento será masivo en el gremio, por esto se imponía avanzar hacia una compensación por parte de las patronales. Otro tanto cabe para la enorme precarización laboral que se extiende por todo el gremio, inclusive en la banca pública.


 


En el conflicto propio del Banco Provincia, que sumó 48 horas más de paro a las realizadas de conjunto, se logró defender la estabilidad laboral con la reincorporación de los cuatro despedidos que querían reingresar, se removió al gerente general Allen que venía de la banca privada y será reemplazado por un funcionario de la planta permanente y se llegó al compromiso escrito de no cierre de ninguna sucursal del banco. Un primer triunfo en toda la línea frente al ajuste que Vidal pretende imponer.


 


El resultado obtenido en todo este proceso demuestra que el conjunto del gremio bancario se encuentra en un ascenso sostenido desde los doce paros contra el impuesto a las ganancias y los despedidos de Tucumán del año 2014, debemos profundizar ese camino por todos los reclamos pendientes.