Sindicales

9/3/2001|698

Los médicos se pronuncian contra la Alianza

Las elecciones en la AMM se han transformado en la antesala de la crisis que atraviesan los sectores progresistas y de la pequeña burguesía desilusionados con el régimen de la Alianza (UCR-Frepaso) y el gobierno de De la Rúa, y de los cuales los médicos son una clara manifestación. El sentimiento de descontento y desilusión de amplios sectores de los médicos municipales, de hartazgo y bronca acumulados durante años en contra de la conducción sindical de la de la AMM, tiene su expresión más acabada en el reagrupamiento antiburocrático que se conformó en torno a la lista “alternativa”, de la cual la agrupación Tribuna de Salud fue su activa impulsora.


La burocracia de Girardi y Visillac no sólo se ha perpetuado al frente de la AMM desde hace más de 15 años, sus integrantes pasaron a ser funcionarios públicos (Lombardo, Buchbinder), y se han ocupado de garantizar sus propios intereses de clase y los del gobierno fondomonetarista, avalando con su accionar toda la política de privatización sanitaria y de deterioro de las relaciones laborales que éste ha impulsado.


Una caracterización acertada


En el acto realizado en la Legislatura porteña en el mes de diciembre de 2000 (ver PO N° 693) hacíamos referencia a esta tendencia objetiva y a la necesidad de un reagrupamiento de la oposición. El acierto de esta caracterización se expresa hoy en el fenómeno de un cuadro de deliberación creciente que recorre al gremio médico y que tiene su manifestación concreta en el surgimiento de listas filiales opositoras (a demás de la lista general “alternativa”) en más de quince hospitales de la ciudad (el 50% de los hospitales), a las que se suma un número no determinado de listas que no pudieron presentarse por las trabas que impone el estatuto, la falta de experiencia de los compañeros y las presiones de todo tipo que el oficialismo ejerce (denuncia de candidatos y activistas, aprietes por intermedio de los jefes o los directores de los hospitales), en suma, la marca, de la podredumbre de una burocracia que ve amenazada su continuidad y sus privilegios.


Alejados de las bases médicas


A nivel general, la conducción de la AMM y la lista oficialista (“Integración”) están desarrollando una campaña de desprestigio de la lista “alternativa” acusándola de ser la lista de los “zurdos” del PO. Apelando a la conquista del voto mediante el recurso del miedo, el autoritarismo y la discriminación ideológica, estos patoteros de guardapolvos blancos enquistados en los sillones de la AMM, son incapaces de presentar el más mínimo balance de su gestión, carecen de todo programa, ocultan que en su propia lista hay elementos descompuestos de la izquierda (Mas, PC) “integrados” al oficialismo y demuestran lo profundamente distanciados que se hallan de las bases médicas, es decir, de sus reclamos y sus reivindicaciones.


Agrupar a la vanguardia


El reagrupamiento antiburocrático que expresa la lista “alternativa” y la consolidación de listas “filiales” opositoras expresa el grado de maduración de un sector de la vanguardia de los médicos municipales. El desafío que se abre para la lista “alternativa” a partir de esta situación es sumar al conjunto de las listas filiales opositoras, detrás del programa de la lista “alternativa” para luchar por la recuperación de la AMM para el conjunto de los profesionales de salud, es decir, por un sindicato independiente del régimen y el gobierno de turno; por la plena vigencia de la asamblea hospitalaria como órgano superior de las decisiones colectivas, por la derogación de la “flexibilizadora” Ley de Empleo Público (Ley 471) y la vigencia de la carrera profesional, los nombramientos y el salario; por la recuperación del hospital público y gratuito, sin tercerizaciones ni privatizaciones (fundaciones, universidades privadas, cooperadoras, ONG); por la oposición a la desregulación de las Obras Sociales, a la privatización del Pami y a la Ley Osba (Ley 472), y por la denuncia del fraudulento presupuesto de salud y el reclamo de un aumento acorde a las reales y crecientes necesidades de la población.


Hacer pie en la AMM es una tarea estratégica, en el camino de la toma de conciencia y el desarrollo de una corriente clasista entre los profesionales del arte de curar; Tribuna de Salud compromete en ello su esfuerzo militante.