Sindicales

11/10/2017

Los obreros de Ledesma vuelven a la huelga


El miércoles, los obreros de Ledesma volvieron al paro por 48 horas en reclamo de aumento salarial. Tras más de quince días de huelga, los trabajadores habían suspendido las medidas la semana pasada.


 


El hecho que precipitó el regreso a la huelga es que el lunes 9, la Carna (Centro Azucarero Regional Noroeste Argentino) y la Comisión Directiva del SOEAIL (Sindicato de Trabajadores del Ingenio Ledesma), junto a delegados electos en asamblea se reunieron por segunda vez para continuar con la negociación paritaria. Pero las patronales volvieron a hacer una oferta miserable. Es una oferta en tres tramos y lleva el salario a inicial a $20.250, por debajo de lo acordado por el resto de los ingenios que integran la cámara patronal.


 


Esta provocación se suma a la maniobra que el Ministerio de Trabajo había orquestado contra la huelga, habilitando a la patronal a liquidar el porcentaje de aumento ofrecido a los trabajadores.


 


El Ministerio y el gobierno de Morales juegan para los Blaquier. El ataque contra los obreros de Ledesma, que incluyó la represión contra un corte en la Ruta 34, se da en el marco de una política de ajuste general a los trabajadores. La reforma laboral anunciada para después de octubre ya se observa en la implementación del turno relevante, en la existencia de los contratos H3 que sólo atenta contra los convenios colectivos de trabajo, y por lo tanto contra las condiciones laborales de los trabajadores. A su vez, hay una persecución a la comisión directiva del Sindicato.


 


En este nuevo escenario, el PO y el Frente de Izquierda brindamos, una vez más, nuestro total apoyo  a los compañeros que vuelven a las medidas de fuerza, entendiendo que hay que tener confianza en los trabajadores que ya demostraron, con el paro histórico de 20 días, que las fuerzas para sostener uno de los métodos históricos de lucha de la clase obrera, sigue intacta.  Ante esta situación, la otra tarea pendiente es abrir un debate con los obreros que aún no se adhirieron al paro, y explicarles que lo que está en juego, no sólo es la paritaria, sino también las condiciones de trabajo, la organización sindical e inclusive los puestos de trabajo, ya que la patronal tiene en vistas reducir personal en un futuro mediato; que la medida de fuerza puede torcerle el brazo a la patronal y al gobierno, y que el paro es la herramienta más importante que tenemos los trabajadores.


 


Vamos por un salario inicial de $21.900. Basta de provocaciones patronales. Basta de perseguir a los que luchan.