Los trabajadores del Ministerio de Educación se están organizando por sus reivindicaciones: la campaña de la Junta Interna por el blanqueo de las sumas en negro y una bonificación salarial y por las condiciones de seguridad, planes de evacuación y salidas de emergencia frente a la instalación de los molinetes, fue ratificada en asambleas en diferentes sectores. 

En el edificio de la ex CITA hay un estado de asamblea permanente que lleva una semana. En DPIE, los aprietes, pre-sumarios y amenazas de traslados a delegados y trabajadores, como represalia a una retención de tareas, terminó provocando mayor adhesión a la medida y un ruidazo en repudio. En Sede se plantaron los choferes contra la disolución de Automotores y el pase al Consejo Escolar del sector de escuelas especiales, así como contra posibles disponibilidades. Las asambleas de Planeamiento y Jubilaciones en el edificio de la ex UEP, de Informática y Cendi resolvieron pliegos de reclamos de cada sector. En pisos de la torre 1 de la DGCyE se resolvió un "frazadazo" por las condiciones insalubres de trabajo.

La nueva fase del ajuste se expresa en el Ministerio de Educación en la implementación del control biométrico de la asistencia para avanzar con descuentos.

El movimiento de lucha y la Junta Interna denuncia y se delimita de la burocracia entreguista de UPCN y SOEME. La Verde de Oscar De Isasi, a su vez, mantiene su método de desmoralización para los estatales, sin promover ninguna acción de lucha profunda ni el paro provincial activo con movilización a Gobernación.

Los kirchneristas priorizan el faccionalismo contra la Junta Interna, intentando "caranchear" mayor representación que la que obtuvieron en las últimas elecciones, exigiendo elecciones complementarias en la DGCyE.

Está planteado hacer masiva la asamblea general del martes 5 de junio, en el camino de un plan de lucha escalonado que pueda arrancar el blanqueo y la bonificación y las condiciones de seguridad, el cese de las persecuciones sindicales, la defensa de los puestos de trabajo en Automotores, por la continuidad laboral de los precarizados y el pase a planta permanente. Estas medidas deben ser un paso hacia la reapertura de las paritarias y para lograr que retrocedan con la regimentación y los descuentos del biométrico.