Sindicales

10/6/2003|808

Los trabajadores de TDO enfrentan el sabotaje capitalista

Se va a cumplir un mes desde que se firmara el acta-acuerdo entre la representación de los trabajadores de TDO, los síndicos y el Gobierno. Hasta el momento, la Secretaría de Transporte nacional no ha efectivizado el suministro diario de gasoil al que se había comprometido, ni tampoco el aporte mensual que correspondía por el subsidio al transporte de pasajeros, que se otorga para todas las empresas. Ese dinero estaba dirigido a la rehabilitación de las unidades deterioradas y a poner más micros en circulación.


Sin estos fondos, parte de la recaudación diaria debe ser afectada a la compra de repuestos y otros arreglos, con lo que se compromete el pago de salarios y, en términos generales, el funcionamiento del servicio.


Importa señalar que la empresa volvió a funcionar, inclusive con un parque automotor inferior al que tenía con anterioridad al conflicto (de 125 unidades se pasó, aproximadamente, a 110). Por más que se tomaron los recaudos, como la ocupación de las terminales, no se pudo evitar que la patronal completara su obra de vaciamiento.


Está claro que este desarrollo que describimos en la nueva etapa abierta luego de la quiebra, no satisface las aspiraciones de los trabajadores; más aún, está a contramano del plan de salvataje y reactivación de la línea elaborado por ellos. El principio rector del plan, vale la pena recordarlo, es que no “sobraban choferes”, como vulgarmente plantea la patronal para justificar sus planes de reorganización empresaria, sino que “faltaban unidades”, para lo cual era necesario, de entrada, aumentar la cantidad de unidades en la calle, con lo que se aumentaba la calidad del servicio, la afluencia del público y, por consiguiente, los niveles de recaudación. Ingresaríamos ÿcomo bien señala el informe elevado a la Secretaría de Transporteÿ en un “círculo virtuoso”, permitiendo en menos de dos años duplicar la cantidad de unidades en circulación, y brindar el servicio de acuerdo a las frecuencias y recorridos que necesita la población de la zona.


Un capítulo especial lo merecen algunas empresas de la zona que están intentando adueñarse de los “pisos” (permisos de explotación) de TDO, poniendo en circulación sus propios micros en ciertos recorridos que le pertenecen a ésta. Esto ocurrió en Merlo con la 216 (perteneciente a La Perlita, que es la empresa que viene monopolizando el transporte de la zona), que fue neutralizado; ahora se vuelve a reproducir en Castelar con la línea 218. Este desembarco sólo se puede dar con el guiño o, al menos, la vista gorda de las autoridades municipales y de la provincia, que, como ya denunciamos, conspiran en connivencia con la Uta, para precipitar la quiebra y el desguace de la línea, y repartir el botín entre los distintos grupos empresarios.


Los trabajadores, aún en este difícil cuadro, han defendido sus conquistas, pues en el curso de esta semana terminarían de cobrar el sueldo básico, el aguinaldo que se les adeuda y, la semana próxima, el viático y el decreto de 200 pesos. A diferencia de lo que ocurría antes de la quiebra, los compañeros de TDO, esta vez, recibirían el 100 por ciento de sus remuneraciones.


Frente a esta situación, los compañeros de TDO se trazaron un plan de acción.


En primer lugar, han enviado una carta a los síndicos y a la Secretaría de Transporte denunciando la situación en la línea, y pidiendo la inmediata convocatoria de la Mesa de Trabajo.


En segundo lugar, han reforzado la lucha por la expropiación. Una delegación se reunió con autoridades del Senado de la Provincia para interiorizarlos de su proyecto.


En tercer lugar, se ha hecho llegar al juez la voluntad de los trabajadores de que se disponga la continuidad de la empresa y se ha puesto en conocimiento del Juzgado la existencia de la Cooperativa, que nuclea a los trabajadores de la línea y cuya finalidad es tomar en sus manos su conducción, administrando los bienes que deberían ser expropiados a la patronal en quiebra.


En cuarto lugar, los trabajadores de TDO han convocado a un Encuentro Nacional de Trabajadores del Transporte, que se realizará el próximo sábado 12 de julio, en la terminal de TDO en Morón (Rivadavia al 17300). El propósito del Encuentro es explicar a todos los trabajadores el desarrollo, el alcance y las conclusiones del reciente conflicto de TDO, abrir una discusión, definir una orientación y trazar un curso de acción en común, frente a la situación que se vive en el gremio, donde decenas de empresas están en una crisis terminal. Los trabajadores de TDO son conscientes de que, en definitiva, la suerte de su lucha, como la del conjunto de los trabajadores del gremio, estará determinada por el escenario general de la lucha de clases, y por ello no se les escapa que es necesario dar pasos efectivos para organizar una lucha de conjunto. Esto pone más que nunca al rojo vivo la necesidad de poner en pie una tendencia clasista en el gremio, capaz de orientar y llevar a la victoria las luchas que se avecinan.