Los compañeros se aprestan a una nueva gran marcha a La Plata. La convocatoria, con destacada participación del Polo Obrero, se extiende a las organizaciones piqueteras y organizaciones populares. La apuesta, esta vez, es contar con la presencia de más vecinos de los barrios afectados y de las mujeres y familias de los trabajadores de la empresa.

El gobierno de Solá viene bicicleteando una definición a favor de la intervención transitoria del Estado en salvaguarda de la línea, cuando salta a la vista que ésta se cae y que la situación es insostenible. Simultáneamente al deterioro de la línea, comienzan a proliferar las acciones judiciales que emprenden los acreedores exigiendo el cobro de lo que se les adeuda. En apenas una semana, TDO sufrió dos allanamientos en los cuales se procedió a través de un gran despliegue de fuerzas de seguridad, para cumplimentar un embargo y una ejecución hipotecaria dispuesta por sendos juzgados. En el caso específico del último procedimiento, la policía ocupó la terminal hasta que los directivos de TDO firmaron un compromiso atendiendo los reclamos de los acreedores. Los trabajadores de la línea ya habían comenzado a concentrarse en la puerta y estaban decididos a tomar medidas de acción directa. Estas acciones judiciales vienen siendo acicateadas por los principales acreedores (en este caso la promovió el banco Citibank), pero entre sus promotores también está la propia Uta, responsable del último embargo. Estas acciones coincidentes apuntan a acelerar el derrumbe de la línea y desmoralizar a los trabajadores. La Uta, en componenda con acreedores, está prendida a esta virtual conspiración para desguazar la empresa y transferir los recorridos más rentables.

Los compañeros, en primer lugar su cuerpo de delegados, son plenamente concientes de que enfrentan una lucha decisiva y que es necesario poner toda la carne al asador. La movilización a La Plata tendrá como objetivo emplazar al gobierno provincial para una salida al conflicto y la exigencia a la Legislatura para un rápido tratamiento del proyecto de expropiación de la línea y su puesta en funcionamiento y administración por sus propios trabajadores. Los trabajadores no descuidan ningún detalle, y mientras se prepara esta gran jornada, se ha avanzado en la instrumentación del control obrero sobre el subsidio estatal que recibe la empresa, de modo de asegurar que esos recursos sean destinados, de acuerdo a lo convenido con la patronal, al pago de los salarios.