El miércoles 14 de julio los más de 300 trabajadores y trabajadoras de la Clínica Güemes, el principal establecimiento privado de salud en el municipio de Luján, iniciaron un plan de lucha debido a los sistemáticos incumplimientos salariales.

Desde entonces y ante la falta de respuesta de la empresa, las y los trabajadores vienen desplegando un abanico de medidas de acción directa con carácter progresivo: diversas asambleas de base en horario laboral, ollas populares, cortes de calles y quite de colaboración, entre otras. En caso de persistir el conflicto las asambleas votaron comenzar un paro total la semana siguiente.

En el día de ayer las y los trabajadores de la Clínica Güemes difundieron una “Carta abierta a la comunidad de Luján” donde solicitaron la solidaridad de vecinos/as y trabajadores/as de la ciudad. Asimismo señalaron que “en tiempos de pandemia somos esenciales frente a la lucha contra el Covid-19, pero invisibles frente a lo que nos corresponde”.

A dieciséis meses del comienzo de la pandemia en nuestro país, esta situación de maltrato laboral y ajuste salarial al personal de salud es inadmisible. Solo en el municipio bonaerense de Luján se registraron durante ese tiempo más de 14.300 casos positivos, de los cuales 277 fallecieron. Sin dudas, las y los trabajadores de la Clínica Güemes integran la primera línea de batalla lujanense contra el Covid-19.

Es interesante señalar que este conflicto local ocurre en una coyuntura general caracterizada por el ascenso de las luchas obreras a lo largo y ancho del país –tanto en sectores ocupados como desocupados-; y, específicamente en el sector de la salud en paralelo a la nodal lucha del Hospital Garrahan (CABA).

Bajo este cuadro de creciente conflictividad social el martes 20 de julio se realizará una Jornada Nacional de Lucha -con movilizaciones, cortes, acampes y actos en distintos puntos de Argentina -convocada a instancias del Plenario del Sindicalismo Combativo.

En Luján, para que triunfen las y los trabajadores de la Clínica Güemes, es fundamental rodear de un masivo apoyo a esta importante lucha contra la prepotencia empresarial y el ajuste que lleva adelante el gobierno nacional junto con gobernadores e intendentes.

Para concluir: ante este escenario de crisis sanitaria y económica es fundamental impulsar la centralización estatal de todo el sistema de salud bajo control de las y los trabajadores y profesionales de la salud en camino a la nacionalización.