Esta mañana, los trabajadores de la fábrica de plásticos Mascardi votaron en asamblea un paro por tiempo indeterminado con permanencia en planta para enfrentar 40 despidos. A partir de la implementación de la medida, el Ministerio de La Plata convocó a una audiencia.

 

A principios de año, la empresa, cuyo titular es Roberto Reidy, procedió a despedir sin motivo a un tercio de la fábrica. Tras un paro total de la planta, el Ministerio de Trabajo dictó una conciliación obligatoria con los despedidos reincorporados. Hace una semana venció la conciliación y la empresa evitó toda negociación y sostuvo todos los despidos, lo cual obligó a los trabajadores a tomar esta determinación.

 

Con el argumento de una baja de las ventas, la patronal se propone proceder reducir sus costos con un ajuste brutal contra los trabajadores de despidos, flexibilización laboral y contratación precaria. Un objetivo que persiguen muchas patronales, como ya denunciaran los gráficos de AGR Clarín que sostienen una ocupación de dos semanas que ha conmovido al movimiento obrero. Unido a esos objetivos, están los intentos de golpear la organización gremial clasista de la fábrica, con la reciente impugnación patronal de las elecciones de cuerpo de delegados.

 

En este momento en la puerta se encuentra una gran delegación de la Coordinadora Sindical Clasista, del Polo Obrero y del Partido Obrero en solidaridad con los trabajadores. Los delegados de Mascardi llaman a todas las organizaciones del movimiento obrero a dar su solidaridad y reclaman al gremio plástico un paro general por el triunfo de esta lucha y para frenar todos los despidos.