El gobierno pretende copar ATE para transformarlo en un apéndice disciplinado, como ya lo ha hecho con Sute, el gremio docente. La organización gremial combativa de los estatales es un obstáculo para los planes de ajuste y privatización del gobierno provincial.

 

En este cuadro se inscriben las “inspecciones” del ministro  de Salud Matías Roby a los lugares de trabajo, buscando responsabilizar a los trabajadores sobre el espantoso estado de hospitales y centros de salud, y ocultar la responsabilidad del gobierno en el desfinanciamiento, la falta de insumos y la anarquía administrativa. Al mejor estilo de los ’90, Roby está vaciando la salud para proceder a su privatización, como ya lo ha hecho con cardiología del Hospital Central.

 

Lo mismo ocurre con Parques y Zoológico, donde las vacantes no se cubren y empiezan a proliferar los contratados, los planes oficiales consisten en entregar los bellos espacios del Parque General San Martín a los empresarios del turismo y la noche.

 

Los contratados abundan en todos los sectores del Estado, el congelamiento de la planta ya ha sido aprobado con la complicidad de la UCR y los PD-PRO.

 

En este contexto, el acoso de la organización gremial, para proceder a su copamiento, por medio de agentes del oficialismo, se ha trasformado en una política de Estado. En Mendoza, este operativo estatal apunta contra la directiva combativa que encabeza Raquel Blas.

 

Los partidarios de esta regimentación estatal reivindican un “modelo sindical dialoguista”, del mismo modo que la Presidenta reivindicó, en noviembre de 2009, el “sindicalismo constructivo”, que adjudicaba a José Pedraza. El Estado enfrenta la combatividad histórica de ATE, mientras descarga la crisis y el ajuste contra los estatales. Quienes encabezan este operativo a favor de un sindicato ‘dialoguista', compartieron durante años la actual directiva. El reforzamiento de la ofensiva estatal contra los trabajadores, en el marco de la gigantesca crisis de deuda, inflación y trabajo, los ha llevado a recular en toda la línea.

 

Mientras, la directiva de ATE y CTA está en una campaña para democratizar Osep, mediante el voto directo de los trabajadores cotizantes, Roby pretende anexarla al Ministerio de Salud para echar mano de los aportes de los trabajadores. ¿Cómo se “dialoga” en este caso?

 

La reacción de los medios frente a lo que ya llaman la “interna” de ATE, confirma que estamos en presencia de un operativo armado desde el Estado.

 

El próximo 8 de octubre ATE va a la huelga por reapertura de paritarias y de las subcomisiones por sector. El plan de lucha se fortalecerá con asambleas. El pliego de reclamos incluye el pase a planta de todos los compañeros contratados, el rechazo a los planes privatistas en salud, transporte y parques y zoológico; un aumento del 20 por ciento retroactivo a julio y doble aguinaldo.

Nos empeñaremos en convertir la diferenciación política en los sindicatos, que crece al compás del vuelco del activismo hacia la izquierda combativa en el plano político, en una herramienta de organización independiente.